El vehículo de una familia oriunda de Tunuyán, que emprendía un viaje desde Santa Fe a nuestra provincia, sufrió un vuelco en San Luis, donde falleció una mujer. Luego de chocar contra un cantero central que sirve de división entre las vías de la Autopista de las Serranías, el auto en el que viajaban cuatro personas dio un giro y finalizó su recorrido contra un poste de alumbrado público. La víctima fatal de este hecho fue identificada como Shirley Wilma Scotta, de 67 años, una santafesina que venía junto a su yerno y a dos nietos, quienes viven en el Valle de Uco.

          Este fatal siniestro vial tuvo lugar el sábado, alrededor de las 15.30, en la Autopista de las Serranías Puntanas, a la altura del kilómetro 730, en la localidad de Fraga. Se trata de un Volkswagen Gacel, con matrícula TML 310, que era conducido por por Alfredo Esteban Daguerre, de 47 años, con domicilio en Tunuyán. Estaba acompañado por Shirley Wilma Scotta y los hermanos Santiago Raúl y María Micaela Torres Stanko, de 12 y 11 años respectivamente, nietos de Shirley Scotta y con mismo domicilio que Daguerre.

         Quienes sobrevivieron al accidente del VW Gacel, Daguerre y los hermanos Torres Stanko, fueron derivados a un centro médico de la ciudad de Villa Mercedes. El diagnóstico de los lesionados fue politraumatismos varios, sin que corriera peligro la vida de las tres personas. El vehículo que conducía Daguerre fue el único involucrado en este suceso, por lo que los policías puntanos que trabajaron en este hecho tratan de establecer las razones por las cuales el conductor perdió el control del mismo.

     Los peritos viales que estuvieron a cargo del procedimiento policial especulan que Scotta no habría llevado colocado el cinturón de seguridad, por lo que fue despedida del habitáculo del VW Gacel. No obstante estas hipótesis son materia de investigación por parte de los efectivos de la Comisaría 14ª de Fraga, donde se labran las actuaciones con la carátula de “Homicidio culposo y lesiones”.

      El domingo, el cuerpo de la mujer permanecía en la morgue del hospital mercedino a la espera de que sus familiares realizaran los trámites correspondientes para trasladarlo a Santa Fe. En tanto Daguerre y los dos niños accidentados continuaban hasta el lunes a la mañana hospitalizados, a la espera de que los médicos ordenaran las altas médicas.