La actividad industrial creció durante el primer semestre del año 7,4 por ciento, ligeramente por encima del ritmo de crecimiento del año pasado, cuando para enero-junio registraba una suba de 7,2 por ciento, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). El organismo confirmó de esta manera los resultados dados a conocer hace una semana, cuando informó que el Estimador Mensual Industrial (EMI) registró en junio una suba de 8,9 por ciento, en comparación a igual mes del año pasado, y de 0,9 en comparación a mayo. Ayer, la ministra de Economía y Producción, Felisa Miceli, defendió el tipo de cambio alto, al cual llamo “pro productivo”, y la intervención del Banco Central, que permite mantener al dólar en torno a los 3,10 pesos, y no a los 2,20 o 2,40 que podría alcanzar. Con esos bajos valores, “la industria hoy no podría ser competitiva ni tener rentabilidad”.

      “Si no hiciéramos todos los días el esfuerzo de sostener este tipo de cambio, no podríamos evitar que otra política antiproductiva se lleve a cambio”. Junto a las declaraciones políticas, en la encuesta cualitativa que realiza el INDEC el 61,4 por ciento de los empresarios consultados no espera modificaciones en la demanda interna hasta setiembre, inclusive, mientras que el 29,5 anticipa una suba, y sólo el 9,1 por ciento prevé una baja. Por el lado de las exportaciones, las opiniones están más divididas, ya que mientras el 53,5 por ciento de los consultados estima un ritmo estable, 30,2 anticipa una mejora y 16,3 por ciento prevé que disminuirán.

     En este marco, 39,6 por ciento de los empresarios consultados aseguró que realizarán inversiones para aumentar la producción, y otro 21,6, para “optimizar” la utilización de insumos. En cuanto a la utilización de la capacidad instalada, el promedio de la industria alcanzó 71,9 por ciento, similar al de junio del año pasado, pero con 8,9 por ciento más de producción, lo que estaría dando cuenta de una mayor productividad, unida a más inversión en algunos sectores. Esta utilización de la capacidad instalada alcanza “picos” de 97,6 en industrias metálicas básica, 94,6 en refinación de petróleo y 87,1 por ciento en textiles.

      En lo que respecta a los rubros con mayor crecimiento durante junio, el sector automotriz lideró la producción con un crecimiento interanual de 32,6 por ciento. Este sector, que gran parte de su producción la destina a la exportación, sólo utiliza 54,3 por ciento de su capacidad instalada, por lo que aún tiene “mucho camino por avanzar”, destacaron tanto en el Ministerio de Economía como voceros de esas empresas. El segundo sector con gran expansión durante junio fue el de minerales no metálicos, vinculados a la construcción, cuya producción aumentó 31,0 por ciento. Estos dos sectores fueron los que el año pasado también lideraron la suba de la actividad manufacturera.