Son padre e hijo y en los últimos días captaron la atención de las autoridades policiales y judiciales del Valle de Uco, cuando no viven esa zona. Protagonizaron dos episodios delictivos y podrían pasar un buen tiempo en la cárcel.

Se trata de Leonardo Antonio y Nahuel Leonardo Trionfetti, de 46 y 25 años, ambos oriundos de barrio La Estanzuela de Godoy Cruz y con pasado carcelario. Si bien ambos cuentan con antecedentes judiciales y policiales, es la primera vez que son detenidos juntos.

El viernes cayeron junto a otros dos cómplices en una persecución policial, luego de un frustrado golpe delictivo en la casa de un comerciante, en Tupungato, de la que se fueron prácticamente con las manos vacías. Cuatro días más tarde, el martes, Trionfetti hijo agredió junto a otro preso a tres policías en la Comisaría 20ª de ese departamento por conflictos con las visitas.

Este miércoles, los Trionfetti fueron trasladados a una penal provincial luego de ser imputados por la fiscal Eugenia Gómez, quien tomó intervención en el expediente por el robo ocurrido durante el fin de semana.

No es la primera vez que Nahuel Trionfetti es investigado por la Unidad Fiscal Valle de Uco. En marzo recibió una condena condicional por lesiones y amenazas agravadas por el vínculo en contexto de violencia de género y quedó en libertad.

Al mismo tiempo, enfrenta otras dos causas en esa jurisdicción, por lesiones, amenazas y abuso sexual, y una en el Gran Mendoza por el delito de lesiones graves.

Incluso, el miércoles de la semana pasada debía presentarse en el edificio del Poder Judicial de la Cuarta Circunscripción para afrontar una audiencia de acusación, en la que podría haber terminado con una nueva condena.

Pero la cita se suspendió porque el juez Fernando Ugarte se encontraba de licencia y dos días después Trionfetti hijo volvió a caer en las garras policiales.

Por su parte, su padre llevaba varios años sin pisar una cárcel o tener roces con la Justicia, desde la época en que su hijo era menor de edad. Ahora, volvió a quedar tras las rejas y, después de mucho tiempo, sumo una nueva causa por robo.

Asalto y persecución

Alrededor de las 11 del último viernes, cuatro sujetos llegaron a bordo de un Honda Civic hasta un domicilio de calle Adolfo Calle, tres de ellos descendieron y sacaron del baúl una caja encintada. Acto seguido, el conductor del rodado se retiró.

Dos de los sospechosos, que vestían uniformes del Correo Argentino, se dirigieron con lo que parecía ser una encomienda a la entrada de la vivienda y llamaron a la puerta. Mientras que el tercero se quedó en las cercanías, haciendo de campana.

Todos esos llamativos movimientos fueron advertidos por un vecino, quien le dio aviso al propietario, dueño de un conocido negocio ubicado en el centro tupungatino. El hombre estaba trabajando en su local y en su casa sólo estaban su esposa y una nuera, por lo que decidió ir a auxiliarlas.

En paralelo, los dos individuos que simulaban ser carteros fueron atendidos por la pareja del comerciante, a quien le apuntaron con un arma de fuego y la introdujeron por la fuerza al inmueble.

En el interior, la amenazaron y le exigieron que les entregara un dinero. La mujer les aseguró que no tenía plata y sólo le robaron un celular. Seguidamente, se dirigieron al fondo de la propiedad, donde vive el hijo del matrimonio junto a su pareja, pero sólo se encontraba esta última.

Los maleantes también amedrentaron a la joven con la intención de sacarle algún dinero. Incluso, la tomaron del cuello y la empujaron contra una pared, aunque terminaron retirándose con las manos vacías.

Cuando emprendieron la fuga, se toparon con el comerciante y familiar de las dos víctimas. El hombre trató de evitar que escaparan, pero le apuntaron con el arma de fuego y mientras se alejaban a pie de ese sector.

Luego, fueron hasta el cruce de calles San Lorenzo y 25 de Mayo, donde los esperaba el cuarto cómplice en el Honda Civic, que no tenía chapa patente en el frente. Los malvivientes huyeron a toda velocidad y tomaron la ruta 86.

Mediante un seguimiento por cámaras de seguridad, pudieron localizarlos y les frenaron el paso en Ugarteche, por personal uniformado de ese distrito de Luján de Cuyo.

Junto a los Trionfetti, iban en el vehículo Yael Axel González Jurado (25) y Gustavo Daniel Díaz Gil, también oriundos del oeste de Godoy Cruz.

Los cuatro quedaron a disposición de la fiscal Gómez, quien los imputó por robo agravado por el uso de arma cuya aptitud para el disparo no puede tenerse por acreditada, en concurso ideal con robo en poblado y en banda en calidad de coautores.

Violentos

El martes, los Trionfetti continuaban alojados en la Comisaría 20ª, ya que debían realizar un par de medidas judiciales, antes de ser trasladados a prisión.

Mientras esperaban recibir las visitas de sus familiares, se tornaron violentos con los efectivos que se encontraban turno en la dependencia y Luciano junto a otro detenido, identificado como Diego Emanuel Fernández Pucho, agredieron a tres de ellos.

A uno le dieron un golpe en la cabeza con un candado, al segundo le arrojaron un táper en la cara y el restante recibió una patada en la espalda, a la altura de los riñones. Si bien las lesiones no revestían gravedad, el hecho provocó revuelo en la seccional de calle Belgrano.

En principio, la causa por la agresión contra los funcionarios quedó bajo la órbita del fiscal Facundo Garnica, aunque no descartan que se acumule al expediente del robo ocurrido el fin de semana.

Lo cierto es que el representante del Ministerio Público los imputó este miércoles por lesiones leves agravadas por ser cometidas contra personal policial.