Durante la noche del lunes, las inmediaciones de las churrasqueras del Parque General San Martín fueron escenario para que se develara un crimen. Ese fue el sitio elegido para asesinar a Pedro Daza, de 44 años. Si bien las primeras informaciones son escasas, los pesquisas aseguran que se trata de un ajuste de cuentas con tintes mafiosos. Daza fue encontrado arriba de un colchón, con pies y manos atados con alambre. Fue salvajemente golpeado y recibió al menos un tiro en la pierna izquierda, lo que provocó que la víctima se desangrara.

     Este hecho comenzó a ser investigado por la fiscal de Instrucción de Capital, Liliana Curri. No hay detenidos ni pistas concretas acerca de quién o quiénes pudieron matarlo. Lo único que hay es una extraña llamada a los familiares de la víctima, advirtiendo de la cruenta situación. Cerca de las 22, los familiares de Daza recibieron, en su domicilio del barrio Lihué de Guaymallén, una confusa llamada telefónica.”Cerca de las churrasqueras del Parque está el cuerpo de Pedro”, le habría advertido un hombre a los parientes de Daza.

     De inmediato, y como no tenían vehículo particular, la esposa de Daza y dos de sus hijos –una mujer y un varón– llamaron a un taxiflet, sospechando lo peor. Cuando llegaron a la parte sur de las churrasqueras del Parque, frente al Zoológico y cerca de la playa de estacionamiento oeste del estadio Malvinas Argentinas, la familia Daza creía que Pedro todavía estaba con vida, ya que el hombre que llamó para ponerlos en conocimiento de la situación no afirmó que Pedro estuviera muerto. Por eso comenzaron una búsqueda frenética en el oscuro lugar, junto al chofer del taxiflet. Pasaron más de dos horas rastreando, pero todo fue en vano.

     No había señales de Pedro. Sin embargo, cuando emprendían la retirada, diez minutos antes de la 1, uno de los familiares advirtió a lo lejos un extraño bulto, cerca de un árbol. Allí, arriba de un viejo colchón, yacía sin vida Pedro Daza, cuya pierna izquierda estaba bañada en sangre y su rostro evidenciaba rastros de una severa golpiza. Como si esto fuese poco, estaba fuertemente atado de pies y manos con alambres. El cuerpo de Pedro Daza fue cargado en el taxiflet y trasladado al Hospital Laggomagiore. Los médicos de guardia confirmaron que Daza estaba sin signos vitales.

     La denuncia por este hecho fue radicada en la Oficina Fiscal de Capital Nº 2, ubicada en la Seccional Sexta del barrio Cano de Capital. Desde esa dependencia, la ayudante fiscal de turno ordenó que se realicen en el lugar del hallazgo las pericias pertinentes, pero hasta ayer a la tarde nada se sabía de el o los autores de este crimen.