Culminadas las audiciones y los workshops, Latin American Idol entrará la próxima semana en sus instancias finales, cuando comiencen los conciertos en los que se definirá quién será la próxima estrella de la canción. Argentina ya tiene cuatro candidatos entre los nueve participantes que salieron de las rondas eliminatorias. Los locales que competirán por ser el nuevo ídolo latinoamericano son Hernán Horacio López Sosa, Noelia Carolina Soto Torres, Dennis Smith y Andrea del Valle Bela.

    “Es una alegría enorme, todavía no caigo mucho. Audicionaron miles de personas y estar entre los 10 seleccionados de toda América latina es un poco fuerte, me asusta”, explicó Andrea Bela, toda una veterana en materia de reality shows, ya que fue finalista de la primera edición de Operación Triunfo. A partir del 30 de agosto, y hasta fines de octubre, Sony Entertainment Television transmitirá los conciertos de Latin American Idol.

    Las galas se filmarán en Buenos Aires, con público en los estudios. Los diez finalistas, nueve de los workshops y el “rescatado” en el programa denonimado La última oportunidad, competirán semana a semana para definir quién gana el premio, consistente en un contrato de grabación para editar un disco a través de la multinacional Sony-BMG. Pero, más allá del hecho de que tienen que enfrentarse por el reconocimiento del jurado, los participantes son muy compañeros cuando se apagan las cámaras. “Cuando participé del segundo workshop los de mi grupo estuvimos hospedados todos en un hotel. Ahí convivimos unos días.

    Está buenísima la mezcla de culturas. Conocerlos a todos fue muy enriquecedor. Me cargué de energía, porque al ser todos artistas disfrutamos de la misma manera; cantando, bailando, jugando, haciendo bromas”. “En ese momento nos olvidamos de que esto es una competencia. Traté de rescatar el aprendizaje humano. Y, la verdad, me emocionó muchísimo el momento de la despedida. Al vivir cosas tan intensas es inevitable, nos enganchamos todos. Este tipo de experiencias tienen eso”, comentó Bela.

    La buena relación también se extiende a los jurados, Gustavo Sánchez, Elizabeth Meza y Jon Secada. “Nosotros estamos siempre en el hotel. Los vemos en la grabación y por ahí nos los cruzamos en un pasillo y los saludamos. Gustavo Sánchez parece el más duro, pero es el más tierno. Nos dijo unas palabras en el pasillo y se emocionó, así que creo que todos están compartiendo las emociones, más allá de que sea una competencia y de que cada uno juegue su papel”, explicó la finalista argentina.

    Por último, Bela, sanjuanina de nacimiento pero radicada en Buenos Aires, opinó sobre las cualidades que debe tener el artista que se convertirá en el primer Latin American Idol. “Siento que para ser un ídolo hay que despertar ciertas cosas en la gente, llegar al corazón, poder ofrecer una identidad y una personalidad artística. Algo diferente, que guste y que la gente se sienta identificada. Creo que en este programa estoy poniendo a prueba eso. Qué pasa conmigo, qué pasa con el estilo que yo ofrezco. A mí me va a servir como prueba”, expresó la cantante.