Los últimos incidentes fueron el incendio de tres colectivos y un ataque a una agencia bancaria en la noche del sábado, en la ciudad de San Pablo, sin víctimas fatales en ninguno de los casos, según la policía. La ofensiva del PCC ha tenido como principal blanco los colectivos urbanos y bancos, pero también han sido atacados camiones recolectores de basura y hasta una ambulancia. Desde la noche del martes, cuando el PCC desató una nueva ola de violencia en el Estado más rico y populoso del país, al menos ocho personas fueron asesinadas, cuatro presuntos delincuentes fueron abatidos y 78 fueron detenidos, según el informe de la Secretaría de Seguridad Pública.
En ese balance, no consta todavía el arresto de Anco Marcio Pereira Maia, de 28 años, jefe interino del PCC en el cinturón industrial de San Pablo, quien fue detenido en la tarde del sábado junto con dos cómplices, según la policía. Pereira Maia había asumido la jefatura del PCC en la periferia de San Pablo tras el arresto, el martes, de Emivaldo Silva Santos, jefe de esa facción criminal en la zona. La detención de Silva Santos fue uno de los factores que desencadenó la nueva ola de violencia del PCC, que en mayo ya había puesto en jaque a las autoridades paulistas con sus ataques.