El secretario general de la ONU, Kofi Annan, aseguró ayer en Yeda (Arabia Saudí) que tanto Israel como el movimiento chií libanés Hezbolá han aceptado la mediación de la ONU para canjear presos. Annan hizo estas declaraciones en una rueda de prensa conjunta con el ministro saudí de Asuntos Exteriores, príncipe Saúd al Faisal, que fue transmitida por la cadena Al Yazira. El dirigente de la ONU aseguró que ambas partes han aceptado sus esfuerzos para resolver este asunto. Annan, que se encuentra inmerso en una amplia gira por varios países de Oriente Medio, dijo que va a designar a una persona para que se encargue de esta mediación, pero no quiso desvelar su nombre.

    Será una persona “que negociará en secreto y con calma”, agregó. Hezbolá capturó el 12 de julio a dos soldados israelíes y manifestó posteriormente que pensaba canjearlos por presos libaneses en Israel. Pero los dirigentes israelíes respondieron esa misma noche con un ataque contra Líbano que ha dejado más de mil muertos, un millón de desplazados y pérdidas millonarias. El Gobierno israelí, encabezado por Ehud Olmert, dijo en un principio que se negaba tajantemente a canjear presos con Hezbolá, pese a que ya lo ha hecho en otras ocasiones en el pasado.

SUSPENDEN REPLIEGUE. El primer ministro de Israel, Ehud Olmert, anunció ayer que suspende el proyecto de repliegue de Cisjordania –pieza central del programa con el que ganó las elecciones generales en marzo–, porque tras la guerra de Líbano, no es lo más indicado. Olmert hizo el anuncio ante el Comité de Asuntos Exteriores y de Defensa de la Kneset (Parlamento), que investiga la actuación y posibles fallas del Gobierno y del Ejército en la conducción de la guerra del Líbano. En repetidas ocasiones, el primer ministro ha contestado, a quienes acusaban a su Gobierno de incompetencia en la guerra, criticando la actuación de ejecutivos anteriores al suyo, porque dejaron que el grupo libanés chíi Hezbolá se armara desde el momento en que Israel se retiró del Líbano.