El Xeneize perdía 2 a 0 y terminó superando por 3 a 2 al Fortín, obteniendo la primera victoria en la Bombonera con Ricardo La Volpe como técnico. Los de la Ribera continúan como únicos líderes del Apertura. Boca logró un triunfo por 3 a 2 sobre Vélez que no solamente hará historia porque lo dio vuelta sobre el epílogo, luego de ir perdiendo 2 a 0, sino que, además, porque fue el primero del técnico Ricardo La Volpe en la Bombonera y porque Fernando Gago marcó su primer gol en Primera.
Boca consiguió un triunfo agónico basado en un notable despliegue físico en el segundo tiempo, como el jueves ante Nacional, en Montevideo, por la Copa Sudamericana (perdía 2 a 0 y, finalmente, cayó 2 a 1), que le permitió tomar el control del juego y convertir al arquero Sessa en figura de su equipo.
Claro que también, como en Montevideo hace 72 horas, los de La Volpe padecieron la fórmula de laboratorio de los de Russo, quienes, en jugadas de pelota parada, llegaron dos veces a cabecear con libertad en el área de los locales. Primero fue Pellegrino, a los 27’, y luego Zárate, a los 34’, para poner 2 a 0 a su equipo.
Y, por si esto fuera poco, apenas tres minutos después llegó la expulsión de Krupoviesa, lo que terminó de complicarle la tarde a los dueños de casa. Con ese panorama por delante salió Boca a jugar el segundo tiempo ante una tribuna expectante, pero la arenga de La Volpe dio resultado y el equipo fue otro en el complemento. Con un jugador menos, Boca salió a acorralarlo a Vélez. A los 11’ se fue expulsado Cubero y los locales fueron una tromba atacando.
Claro que, conforme Palacio se iba perdiendo opciones frente al arco y crecía la figura de Sessa, el nerviosismo iba en aumento en la popular local. Hasta que a los 23’ Gago llegó, por fin, a convertir el primer gol de su carrera, con un terrible zapatazo que se clavó en el ángulo derecho del arco del Gato.
La cancha quedó volcada sobre ese arco y la paridad del Xeneize era inevitable. Y el empate llegó después de una gran salida desde el fondo de Morel Rodríguez, quien habilitó con precisión a Palacio para que el ex Banfield consiguiera el merecido empate. Y como aún quedaba un cuarto de hora, Boca sintió que podía ganar y lo logró apenas un minuto antes del final.
Fue otra vez Palacio el que hizo delirar a la gente, esta vez, tras una asistencia de Ledesma, consiguiendo una victoria más que estimulante, a sólo una semana del superclásico en el Monumental.