En la madrugada de este lunes, dos micros que venían de Chile y se dirigían a la Ciudad de Mendoza fueron apedreados en Uspallata. No hubo heridos, pero las unidades tuvieron varios daños, entre ellos, la rotura de vidrios.
El violento hecho ocurrió entre el Gran Hotel de Uspallata y la estación de servicio YPF, sobre la ruta 7. En ese momento varios micros, que volvían del vecino país, recibieron el impacto de las piedras que -según el relato de los choferes- un grupo de tres personas comenzaron a arrojarles desde la oscuridad.
Los choferes, que están instruidos con la orden de no detenerse ante esa situación, continuaron la marcha y se dirigieron rápidamente a la Comisaría 23 para denunciar el ataque. Cuando los efectivos policiales llegaron a ese sector, no encontraron a nadie.
“Hace un mes y medio que comenzaron a tirar piedras en Uspallata a los micros que vienen a Mendoza”, sostuvo Mauricio Badaloni, presidente de Andesmar, a El Sol.
En esa misma línea sostuvo que sospechan que la intención que tienen los agresores es forzar la detención de la unidad, para robarle a los turistas.
El colectivo de Andesmar sufrió daños en el parabrisas y en una ventana del piso de abajo. Los mismos destrozos tuvo un micro de compras que marcha detrás. Ningún pasajero registró heridas.
En tanto que el gerente de la Terminal de Mendoza, Omar Olmos, comentó que una vez al mes los micros tienen que regresar porque fueron atacados con esta modalidad. “Todos los colectivos de larga distancia tienen abollones de los `misiles´ que les tiran”, dijo.
A partir de este último ataque en plena ruta 7, recomiendan a los pasajeros que no corran las cortinas para evitar algún accidente.
“Esto pasa en todo el país, no sólo en Mendoza”, sostuvo Olmos y agregó que estos hechos no toman trascendencia porque es muy difícil saben quiénes fueron los autores.