Un avión de Aerolíneas Argentinas que había despegado de Córdoba con destino a Salta sufrió una despresurización, debió regresar al aeropuerto internacional Ambrosio Taravella y aterrizar de emergencia la tarde de este viernes.

Desde el sitio Aviacionline se precisó que se trató de un Boeing 737-800 con matrícula LV-FXQ que alcanzó los 35.950 pies de altitud antes de iniciar el procedimiento de descenso de emergencia. Tras ubicarse debajo de los 10.000 pies se estabilizó y continuó su descenso hasta aterrizar en el aeropuerto Taravella.

En la aeronave viajaban 140 pasajeros y 60 tripulantes y si bien los primeros reportes indicaban rotura de ventanillas o daño estructural, se descartó esas versiones.

Desde la empresa indicaron que “hubo caída de máscaras” y que “por prevención el avión tiene que aterrizar y como es urgencia en el aeropuerto se dispara el protocolo de emergencia”.

🔺El vuelo #AR1516 de @Aerolineas_AR que había despegado de Córdoba (COR) 13:38 con destino Salta (SLA) tuvo que realizar un descenso en emergencia por problemas de presurización. Hubo reporte de heridos a su retorno. Boeing 737-800 #LVFXQ #QRF @RadarBox24 pic.twitter.com/03s8TfE2Rr

— 𝗔𝘃𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗲𝗻 𝗘𝘇𝗲𝗶𝘇𝗮 (@AvionesenEzeiza) March 4, 2022

Personal médico atendió a seis pasajeros con cuadros menores de pánico, dolor de oído o presión arterial, aunque ninguno requirió su traslado a un centro asistencial.  

El avión quedó desafectado y se aguarda la declaración de la tripulación y el informe técnico resultante de la recorrida de mantenimiento. Además la Junta de Seguridad en el Transporte tomó intervención y solicitó las llamadas cajas negras.

El vuelo nuevo saldrá 20.30 horas rumbo a Salta.

María del Carmen, una de las pasajeras que iba a bordo del vuelo, relató que “todo parecía normal. Y a los 10 minutos del despegue, creo que habíamos alcanzado altura de crucero. Se empezó a notar nerviosismo en la tripulación. Empezaron a hablar por el altoparlante. Y a decir que bajemos las mascarillas y a tirar para poder respirar”.

La pasajera indicó que en ese momento les informaron sobre la despresurización. “Sentí un dolor espantoso en el oído. Pienso que hay gente a la que se le perforó el tímpano. Yo me recuperé”, detalló.