Marcelo Weigandt comunicó que no renovará su contrato con Boca Juniors, que vence a fin de año, abriendo la puerta a posibles movimientos durante este mercado de fichajes. En tal sentido, el propio futbolista solicitó las autoridades xeneizes que acepte la oferta de Inter Miami, el equipo estadounidense donde juega Lionel Messi.

La intención del lateral derecho era que Boca reciba algo de dinero por la transacción y él no tenga que irse libre. Pero la negativa de la dirigencia encabezada por Juan Román Riquelme hizo estallar una bomba.

Alejandro Weigandt, el papá del futbolista, apuntó con todo contra los directivos que complican la salida de su hijo del club y escribió en su cuenta de Instagram: “Todo lo malo vuelve. No entiendo cómo no dejan crecer a un jugador que en dos meses quedaría libre. O sea que prefieren perder dinero y decir lo más fácil siempre echarle la culpa al jugador que es mercenario. Lo mismo de siempre, muy bien se manejan”.

El último partido de Weingadt con la camiseta de Boca fue en Mendoza, en la victoria de Boca por 2a1 ante Godoy Cruz, en noviembre del año pasado. Como las negociaciones por la renovación de su contrato no prosperaron, el futbolista fue “colgado”, como ya había pasado con otros jugadores que en su momento tampoco quisieron extender su vínculo. En ese listado se anotan Nahuel Molina, Cristian Pavón, Agustín Almendra, Agustín Rossi y Alexis Mac Allister, entre otros.

Inter Miami propuso un acuerdo económico para incorporar al jugador antes de que su contrato expirase, pero el Xeneize puso un precio de un millón de dólares por la ficha del defensor, una cifra que espantó al club estadounidense.

El defensor debutó en Boca en abril del 2019 y conquistó seis títulos (dos torneos de Primera División, dos Supercopa Argentina, una Copa Argentina y una Copa de la Liga). En total disputó 72 partidos, en los que aportó tres goles y brindó siete asistencias.