El Gobierno de Mendoza anunció este jueves el nuevo protocolo de contingencia frente a un cierre prolongado del Paso Internacional Cristo Redentor que, comenzada la temporada de otoño/invierno, suele verse afectado por fuertes nevadas en alta montaña. Aunque en los papeles resulte atractivo y eficiente, hay un factor que depende de la órbita nacional y que -desde siempre- queda desatendido: el estado de los baños en el complejo fronterizo Horcones.

Consultado por la prensa durante la presentación del operativo delineado entre 10 actores clave del paso, Juan José Báscolo, coordinador general del Sistema Integrado Cristo Redentor, hizo referencia puntualmente al estado de los sanitarios: “Los baños están siendo puestos en valor. Pueden ingresar adentro del centro de frontera y van a ver que están en obras, se están trabajando con dos baños interiores”.

Y amplió: “Esa remodelación está ajustada al proyecto de ampliación y modernización del centro de frontera, no obstante, hemos colocado un módulo de sanitario en auxilio (baño químico) mientras se trabaja en obra en el sector interior del centro de fronteras”.

Sobre los plazos de las obras, sostuvo que “va a depender de los recesos que estén dentro de la contratación” y atajó posibles demoras amparado por las inclemencias climáticas del invierno en la montaña: “Sabemos que ahora en invierno las condiciones no son las mejores para trabajar con los materiales en la zona de alta montaña, los baños que estamos trabajando, van a estar terminados en junio”.

A mediados de marzo, el embajador argentino en Santiago de Chile, Jorge Faurie y su par trasandino, José Antonio Viera Gallo, se encontraron en Mendoza para hablar sobre los problemas que se encuentran en el tránsito internacional

Estos puntos ya se los habían planteado a Faurie en enero, cuando el embajador argentino tuvo un encontronazo con el cónsul chileno en Mendoza, David Quiroga Hinojosa, debido a las demoras en la aduana. Faurie consideró que era “pura burocracia” las explicaciones que les dio el diplomático extranjero y lo de los baños fue un punto de reclamo, aunque apenas dos meses después se anunció el comienzo de las obras.

Las mismas constaban en la construcción de cuatro unidades nuevas: dos para hombres y dos para mujeres. Además, afirmaron que se contemplaba la instalación de baños para la atención sectorizada de colectivos de migraciones, a medida que avance la obra de modernización.

Sin embargo, en el acto al que convocó la Provincia este jueves en el complejo fronterizo, quedó a la vista que los problemas persisten: deterioro en las instalaciones, falta de higiene y pocas señales de mejora a la vista.