Comisaría 36.

El activista mapuche, Facundo Jones Huala, pasó la noche solo en un calabozo de la Comisaría 36 de Dina Huapi, un pequeño pueblo turístico cerca de Bariloche. Fue detenido en la madrugada del lunes tras haber sido denunciado por ingresar a un domicilio particular y romperá una ventana.

La Comisaría 36 donde pasó la noche es un edificio de poco tiempo y grande, pero que habitualmente cuenta con el servicio de pocos policías, según la demanda del pueblo.

La detención por el daño y violación de domicilio activó dos acciones judiciales muy trascendentes: el reclamo de la justicia de Chile, que quiere la extradición para que termine de cumplir la condena de 9 años de prisión por incendiar un establecimiento rural, y la justicia federal argentina, que piden al detenido para extraditarlo.

El momento de la detención.

Por acción del fiscal rionegrino Marcos Sosa Luckman, Jones Huala fue trasladado discretamente desde El Bolsón a la Comisaría 36 de Dina Huapi, por un trayecto de 150 kilómetros.

El jefe de los fiscales provinciales, Martín Lozada, anticipó a Infobae que desde este martes estará “a disposición de la justicia federal”.

“El proceso por la extradición ya se inició, y va a derivar en la realización de un nuevo juicio. Los pasos a seguir son los detallados en la Ley 24.767 de Cooperación Internacional en Materia Penal y por el Tratado específico en la materia que Argentina tiene con Chile”, explicó a ese diario la fiscal federal de Bariloche María Cándida Etchepare.

Tras la nueva detención del lunes en El Bolsón, el Gobierno de Chile pidió elevar la alerta a Rojo, lo que incluye el pedido de extradición.

Con información de Infobae