Docentes bonaerenses cumplieron ayer la primera huelga del año en reclamo de un nuevo aumento salarial, por lo cual no pudieron reanudarse las clases en las escuelas estatales de la provincia tras el receso invernal, en tanto, fue menor la adhesión en establecimientos privados. El director General de Educación bonaerense, Mario Oporto, confirmó ayer que el viernes presentará una propuesta de aumento salarial a los docentes, en el marco de las paritarias del sector.

    “El viernes es mi límite y los números se los presentaremos a los gremios en paritarias”, aseguró Oporto en rueda de prensa tras una reunión de Gabinete, y declinó hablar de cifras. Respecto del paro, estimó que la medida “fue alta en las escuelas estatales y baja en las privadas”. La titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, que integra el Frente Gremial con Suteba, UDA, los técnicos de AMET y los privados de SADOP, aseguró, por su parte ,que fue “total”.

   
La mayoría de las 19.000 escuelas del conurbano y distritos del interior provincial permanecieron ayer abiertas, tal como anticipó Oporto. Ante la evidencia de la huelga, muchos padres decidieron no enviar a sus hijos en el primer día de clases después de las vacaciones. El gobernador Daniel Scioli, tras confiar que “el diálogo podrá destrabar el conflicto”, indicó que ve “con preocupación, con angustia, que muchas escuelas no hayan recibido directamente a los alumnos como consecuencia del paro”.

    Oporto, no obstante el conflicto, consideró ayer la posibilidad de mejorar el “importante aumento” que dieron en marzo, consistente en 24 por ciento, que elevó el sueldo inicial a 1.290 pesos, pero agregó que “20 por ciento es una locura –en referencia a la exigencia sindical– ya que así llegaría a 50 por ciento anual, cosa que ni pensamos”.