El seleccionado argentino femenino de básquetbol perdió ayer ante Lituania por 62 a 47, en un partido correspondiente a la segunda fase del Campeonato Mundial que se desarrolla en San Pablo, Brasil. Verónica Soberón, con 14 puntos (4 de 6 en dobles y 6 de 9 en libres) y 4 rebotes, fue la mejor jugadora del seleccionado dirigido por Eduardo Pinto. Por su parte, Natalia Ríos y la mendocina Carolina Sánchez convirtieron 8 puntos cada una. Hoy a las 17.30 (con televisación de TyC Sports), Argentina se enfrentará a Australia, invicto y líder del Grupo E.
Tras esta derrota, la clasificación del seleccionado argentino a cuartos de final quedó sumamente complicada, ya que hoy deberá derrotar a Australia o esperar que se den ciertos resultados que lo favorezcan. Como se preveía, la altura de las jugadoras lituanas fue una de las claves que sirvió para definir el partido. Las europeas ganaron la lucha bajo ambos tableros (47 rebotes –18 fueron ofensivos– contra 26) y eso le dio dos y hasta tres chances de tiro, sin que las jugadoras argentinas, que sin lugar a dudas sintieron el esfuerzo físico realizado hasta aquí, pudieran neutralizar esa faceta del juego.
Como si sólo esta alternativa no fuera suficiente, Argentina sintió el bajo goleo que tuvo su máxima anotadora, Gisella Vega, quien apenas marcó 7 puntos (consiguió también 8 rebotes). Además de verse complicada con la altura de las pivotes lituanas, Vega sufrió una leve torcedura en su tobillo derecho en el primer tiempo, algo que condicionó aún más su actuación. Sin vías de gol (de nuevo el equipo tuvo una pobrísima puntería en triples al errar los 9 intentos realizados y consiguió 32 por ciento en tiros de 2 puntos) y con una defensa que no aguantó todo el partido, Argentina supo a mediados del tercer cuarto que el encuentro era irremontable.