Por los pasillos de la Casa de Gobierno se lo vio ayer al titular de Edemsa, el empresario Omar Álvarez. Resulta que el hombre estuvo de gira por los despachos para hablar de su idea de una empresa provincial de petróleo. Primero, estuvo con la ministra de Economía, Laura Montero, y después se reunió con el titular de la cartera política, el odiado por los iglesistas, Sergio Marinelli. Un periodista de este diario ubicó telefónicamente a Marinelli para preguntarle por la presencia de Álvarez y el motivo de la reunión. Marinelli se hizo el gracioso y dijo: “Me vino a saludar”. Nuestro periodista respondió: “Bueno, listo, pongo eso”. Marinelli se desesperó por la repercusión de su “amistad” con Álvarez y se apuró a explicar las verdaderas razones de la reunión. Buenísimo.