Mientras el radicalismo apura al PRO para que defina si continuará dentro de Cambia Mendoza, Omar De Marchi aseguró que está recibiendo “presiones insoportables” por parte de un sector del radicalismo. Y si bien desligó a Rodolfo Suarez y dijo que tiene “afecto personal” por el gobernador, criticó duramente su administración.

“La de Suarez no es una gestión de un gobernador”, lanzó De Marchi en Radio con Vos. “Hubiera querido que el gobernador de Mendoza siguiera siendo gobernador. Ya no aparece hablando de los problemas de la provincia, es todo rosca política”, agregó el diputado nacional en otro reportaje radial.

Así, en medio de una feroz interna en Cambia Mendoza, De Marchi subió al ring a Suarez. Su otro contrincante predilecto, Alfredo Cornejo, tiene los guantes puestos desde hace mucho tiempo.

“Hace dos meses escuché al gobernador decir: ‘No se habla de candidaturas, no hay que hablar de política, hay que hablar de gestión’. Un día dijeron que Cornejo iba de (precandidato) gobernador y al parecer desde allí no hubo más trabajo profundo de la provincia”, agregó el líder del PRO mendocino.

De Marchi ratificó que la ruptura “es posible”, aunque negó que el eventual divorcio entre el radicalismo y el PRO sea beneficioso para otras fuerzas, como el kirchnerismo. “Ha caído mucho y no es opción en la provincia”.

“Podemos discutir entre dos frentes alternativos que eventualmente coincidimos a nivel nacional, pero tenemos visiones diferentes en Mendoza”, explicó el lujanino. “No es una cuestión de amontonar para ver si se puede cerrar un acuerdo. Vamos a intentar hasta ese momento encontrar coincidencias, que seguramente las haya“, adelantó.

El diputado nacional, con intenciones de gobernar la provincia, volvió a rechazar el ultimátum radical y ratificó que el plazo para definir las alianzas es el 12 de abril.

“Pongámonos de acuerdo con la provincia que queremos y ahí vamos a estar transitando el mismo camino o solo vamos a estar haciendo un amontonamiento para que a Mendoza le siga yendo mal. El plazo es el 12 de abril. Puede que podamos ponernos de acuerdo antes o no”, insistió.

Por otra parte, se refirió a la “libertad de acción” otorgada a los dirigentes del PRO de los departamentos que desdoblaron las elecciones (Lavalle, La Paz, Santa Rosa, Maipú, San Carlos, Tunuyán y San Rafael) para confirmar si participarán de las listas de CM.

Hay libertad de acción en los municipios para que decidan qué proyectos quieren integrar. Se convocó a una Asamblea y se darán las aprobaciones para la integración formal. El que quiere lo hace; el que no, no lo hace“, dijo De Marchi.

  • Críticas

“Mendoza hace muchos años que viene declinando a mano de provincias vecinas, ha perdido potencia producto de la sucesión de gobiernos que creo no asumen riesgos. Gobernar es asumir riesgos. Lo peor que podemos hacer es gobernar con encuestas“. 

  • El crecimiento del PRO

“El PRO es un partido institucionalmente fuerte en Mendoza, el partido que más ha crecido en los últimos años: de un solo legislador en el 2015, hoy tenemos nueve legisladores, un intendente, dos diputados nacionales”.

  • Las presiones

“Este último tiempo estoy teniendo presiones que son insoportables. Escuchar al presidente del radicalismo mendocino (Tadeo García Zalazar) decir que hay que intervenir el PRO… Estamos naturalizando cosas que en Mendoza nunca pasaron”.

“Estoy en tiempo de extrema incomodidad personal. Amenazas directas, no. No quiero decir que estamos en presencia de un gobierno autoritario. Con Rodolfo Suárez tengo un afecto personal, pese a las diferencias que podemos tener, pero hay otros grupos muy duros dentro del radicalismo que son complejos”.

  • Sus pretensiones

“Mendoza necesita involucrarse en un proceso muy fuerte de transformación, otorgando la potencia que ha perdido. A mí me gustaría liderar ese proceso de construcción porque creo tener la capacidad para poder hacerlo”.