Durante el primer semestre de este año, más de 400 mil personas se encontraban bajo la línea de pobreza en el Gran Mendoza, según las estadísticas oficiales publicadas en la tarde de este miércoles por el Indec. Esto representa un aumento del 3,2% en un año. Pero donde se ve el mayor impacto de la crisis económica ha sido en la indigencia, puesto que en 12 meses aumentó el doble la cantidad de personas en esta situación.
La cifra, con todo, es desactualizada, ya que no registra aún el impacto de la devaluación del 22% que se aplicó en agosto.
En números concretos, en los primeros seis meses de 2023, el nivel de pobreza llegó al 41,8% de la población en el Gran Mendoza. Es decir, que afectó a 437.497 personas en ese periodo, e impactó a 110.330 hogares de la principal área metropolitana.
En tanto, la indigencia afecta al 8,7% de los mendocinos, en otras cifras, a 91.227 individuos en 22.823 hogares.
El registro actualizado del primer semestre implica un aumento del 3,2% respecto al mismo periodo de 2022, cuando la foto de ese momento advirtió que era de 38,6%. Dicho de otra manera, este crecimiento implica que casi 36 mil personas se convirtieron en nuevos pobres. Hay que decir que ya venía en aumento en los dos semestres medidos de 2022 -en el segundo alcanzó el 41,7%-.
Por otro lado, el dato local es superior al promedio nacional, ya que fue del 40,1%.
Pero sin dudas lo que más creció fue la indigencia, de hecho, lo hizo el doble en un año. En el primer semestre de 2022 el 4,6% de la población era indigente y su situación impactaba en 3,8% de los hogares del Gran Mendoza.
Un año después, la población indigente aumentó un 4,1% en 12 meses, al ritmo de la crisis económica. Se puede interpretar, entonces, que más de 43 mil individuos se sumaron a este pelotón que sobrevive en el día a día realizando changas.
Donde precisamente se refleja el impacto es en la canasta básica. En un año, la canasta básica alimentaria tuvo un incremento del 119,9% -es la que marca el nivel de indigencia-, mientras que la canasta básica total el incremento fue del 115,8% -la que determina el umbral de pobreza-.