Mauricio Macri y Patricia Bullrich esperan el regreso del presidente Javier Milei para cerrar lo que será un nuevo frente político a nivel nacional. De concretarse, el armado de esta coalición repercutirá en la provincia, ya que distintos sectores del PRO forman parte de Cambia Mendoza.

A un poco más de 50 días de su llegada a Casa Rosada, el líder de La Libertad Avanza está a punto de patear el tablero político tanto del país como de Mendoza en su posible alianza con el macrismo.

En la provincia, están expectantes de la cumbre entre Milei y Macri. No sólo el PRO, sino también el Partido Demócrata, el Partido Libertario, en La Unión Mendocina y hasta el propio radicalismo. La negociación que suceda entre el actual presidente y el exjefe de Estado repercutirá en los partidos mencionados: de opuestos en el ámbito provincial, pueden llegar a ser aliados a nivel nacional.

Tanto el PRO, el PD, el Partido Libertario como el sector de Omar De Marchi -que todavía revalida su afiliación al macrismo- han manifestado públicamente su apoyo hacia el Gobierno nacional.  En cambio, la UCR mendocina, sacando al grupo que responde al ministro de Defensa, Luis Petri, han preferido manejar con cautela su adhesión a la gestión de Milei.

Un claro ejemplo son las diversas declaraciones del gobernador Alfredo Cornejo que, más de una ocasión, afirmó “garantizarle gobernabilidad” al Ejecutivo y una muestra fue la actitud que tuvieron los diputados nacionales Lisandro Nieri y Pamela Verasay en votar a favor de la Ley Ómnibus.  

Pero también, el mandatario provincial no ocultó su enojo por la quita de los subsidios al transporte al definir la medida de Milei como “tonta, rídicula y poco inteligente”.   

Un sector que posiblemente se verá contra las cuerdas por este nuevo frente nacional será el del PRO que forma parte del oficialismo provincial. Tanto la vicegobernadora, Hebe Casado, como los cuatro diputados “amarillos” (Enrique Thomas, Guillermo Mosso, Sol Salinas y Gabriel Vilche) deberán tener la cintura política necesaria para no quedar atrapados con sus intereses provinciales como nacionales.

Las repercusiones del acuerdo

Dirigentes de las distintas fuerzas remarcaron que este acuerdo se da por las “coincidencias ideológicas y de país” que tienen estos sectores.  Pero deslizaron diferentes posturas sobre el impacto en el teatro político local.

Frente a esta incertidumbre, Casado se mostró tranquila al afirmar que “primero se tiene que firmar el acuerdo y después nos sentaremos a conversar”.

Para la vicegobernadora, el acuerdo Macri/Milei no va a repercutir en Cambia Mendoza ya que la coalición provincial tiene “muy claro sus objetivos de gobierno”. Por el contrario, para la diputada Sol Salinas, el nuevo frente nacional sí va a traer consecuencias en CM debido a “las diferencias ideológicas que hay en el frente”.

Por su parte, los libertarios resaltan las “cercanías ideológicas” que hay con el PRO, aunque nivel local son prudentes. Mantienen una buena relación con todos los sectores, pero primero deben resolver sus cuestiones internas.

Hay que ver qué hace el sector que está con el cornejismo”, afirmó el presidente libertario José Caviglia, que resaltó las diferencias que mantienen con el gobernador.

Por el lado del PD, asumieron que “no está muy claro el panorama en la provincia” y que es muy pronto hablar de repercusiones cuando el PRO tiene sus internas y elecciones en marzo.

Veo difícil la postura del PRO que está con Cambia Mendoza en cómo se va a manejar en temas como los fondos fiduciarios que tanto hay en la gestión provincial y que Milei quiso controlar, pero que no acompañaron en la Ley Ómnibus”, enfatizó el presidente del PD, Armando Magistretti.

Para el diputado nacional de LaUM, Álvaro Martínez -ex presidente del PRO en Mendoza hasta la intervención-, no hay que quedarse en los partidos políticos sino que la discusión se centra en aquellos dirigentes que apoyan las medidas o proyectos que presenta Javier Milei.

Acá va a quedar reflejado quiénes quieren trabajar por el verdadero cambio que necesita la Argentina. Esto va más allá de lo que haga el PRO. No hay que quedarse con los partidos políticos”, sostuvo Martínez.

¿El fin de Cambia Mendoza?

En líneas generales, los dirigentes coincidieron que producto del acuerdo entre el PRO y LLA, se vendrán tiempos de más cambios en la conformación de frentes políticos, pero que los mismos deberán dejar en claro sus posturas frente a temas puntuales.

Casado fue la única que se mostró cautelosa y relativizó el alcance del acuerdo a nivel local. “No va a tener incidencia en Cambia Mendoza la creación del frente nacional”, porque consideró que la coalición de gobierno provincial tiene una orientación “clara, que es priorizar el cuidado y los intereses de la provincia. No afecta lo que hagan sus partidos a nivel nacional”.

Sin embargo, para Salinas se abre una posibilidad de avanzar en una conformación de un nuevo frente en la provincia. “Los dirigentes tienen que dejar de lado sus intereses y escuchar a la gente.  Ellos eligieron a una persona como Milei para romper con la vieja política porque quieren algo nueva para la Argentina”, subrayó.

Respecto al futuro de Cambia Mendoza, la diputada provincial remarcó que el frente oficialista se creó en 2015, en un contexto diferente. “Ahora lo más sano es hacer una renovación de ideas y estar a la altura de las demandas que nos propone la sociedad actual. Poco tenemos que ver con Libres del Sur o el Socialismo. Hay que dejar de lado la historia partidaria, a la gente no le interesa”, enfatizó la legisladora bullrichista.

Salinas vislumbra como posible para 2025 ese nuevo armado porque “es la antesala de lo que va a ser el 2027. Si seguimos en la misma, la anti política nos va a volver a llevar puesto”.

Pero desde la oposición provincial, tomaron distancia frente a la posibilidad de hacer un nuevo frente.

Para entender este rompecabezas político, hay que recordar que La Unión Mendocina es el principal bloque opositor de Cornejo y que el PD y el Partido Libertario son oposición a Cambia Mendoza, pero mantienen diferencias o ya no forman parte de LaUM.

El PRO y el radicalismo tienen que definir qué son y qué quieren para el país y para la provincia. Es una discusión que nos tendremos que dar puertas adentro. Vamos a tener que ponernos de acuerdos con temas como Impsa o la creación de empresas estatales, entre otros temas”, se explayó Magistretti.

Por lo pronto, el presidente de los demócratas asegura que “veo muy difícil volver a trabajar con Cornejo. Hay que ver qué postura tomará el cornejismo, si apoya realmente al gobierno de Milei. No se puede poner huevos en todas las canastas”.

Además, el senador provincial puso en duda el futuro de La Unión Mendocina.

Otro tema a discutir es sobre el futuro de LaUM. Hay muchas reuniones pendientes y hay que darle una vuelta de tuerca al frente y orientar nuevos objetivos. En Mendoza, el PD y el Partido Libertario son los únicos que tienen sus posturas bien marcadas para el país que queremos”, sentenció.

En cambio, Álvaro Martínez recordó la interna que hay con el PRO que forma parte de Cambia Mendoza luego de que Omar De Marchi se fuera de CM para lanzarse como gobernador y crear LaUM.

A nosotros nos intervinieron injustamente por romper con Cambia Mendoza y ahora la vicegoberndora y su gente alentarán a la ruptura del frente. Ni ellos se entienden”, manifestó el legislador nacional.

Por último, el delfín de De Marchi fue cauto ante la consulta de la conformación de nuevos frentes políticos y aseguró la continuidad de LAUM.

Falta mucho para hablar de futuro acuerdos. No hay que quedarse con los envases sino con aquellos que proponemos los verdaderos cambios, no hay que quedarse con el relato. LaUM seguirá apostando al cuidado de los intereses de Mendoza. Siempre vamos a proponer cosas que favorezcan a todos los mendocinos”, finalizó.