Una conocida estación de servicio en pleno centro de la Ciudad de Mendoza tuvo que suspender buena parte de sus ventas este miércoles por la tarde debido a que se quedó sin combustible en la mayoría de sus variantes.

La imagen, tomada por un transeúnte que caminaba y observó el momento en que el empleado colocaba las advertencias para los automovilistas, señala de manera bien gráfica que sólo se podía cargar una de las cuatro tipos de nafta. 

¿Señal de lo que podría pasar en Navidad? La Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) manifestó su preocupación por estos días por el abastecimiento para las fiestas de fin de año, ya que sostienen que hay faltantes en varias ciudades del país, entre ellas, Mendoza. 

“Desde hace varios meses las estaciones de servicio vienen denunciando una crisis sistémica que ocasionó un faltante de combustible a lo largo de todo el país”, expresaron en un comunicado.

¿Cuál sería la razón del desabastecimiento que podría complicar a las ciudades turísticas como Mendoza? “Por un lado, tanto el congelamiento de precios, como el incremento de los costos, ha motivado que algunos proveedores mayoristas están regulando las entregas por medio de cupos o precios diferenciales que son imposibles de asumir”, explicaron desde la cámara. En este caso apuntan contra el congelamiento, porque redujo el margen de rentabilidad. 

El comunicado de YPF

En tanto, en medio de esta situación, este martes YPF emitió un comunicado para disipar dudas. 

“YPF posee más de 1600 estaciones de servicio en todo el país, y casi el 10% de esas estaciones son operadas en forma directa.

La compañía está abasteciendo una demanda un 6% por encima de los niveles del mes de diciembre de 2019. Sin embargo, no se registran problemas de abastecimiento en toda la red de estaciones bajo bandera YPF.

Como es habitual para esta altura del año, YPF establece un operativo especial logístico que le permite garantizar el abastecimiento, reforzando el despacho de combustibles: 70 unidades adicionales a la flota y 130 conductores; una optimización del despacho desde las terminales para acortar distancias y tiempos; y se profundizaron los controles de seguridad en estaciones y transportistas para evitar quiebres de stock, entre otras medidas”.