Petya Koeva Brooks, subdirectora del Departamento de Investigación del Fondo Monetario Internacional (FMI), señaló que la inflación proyectada para Argentina en 2023 será de 120% y la recesión de 2,5%.

“Fue una revisión significativa a la baja, cuya razón principal fue la sequía. Al mismo tiempo, la reactivación del sector agrícola es el mayor motivo para explicar el rebote proyectado de crecimiento para 2024″, explicó Koeva Brooks.

Por su lado, el director de esa área, Pierre-Olivier Gourinchas, agregó: “Argentina está enfrentando una situación muy difícil, que empeoró debido a la sequía del último año”.

La situación en la región

Según Ámbito, el FMI estimó que la economía de América Latina y el Caribe crecerá un 1,9% este año, lo cual es 0,3 puntos porcentuales más alto que la estimación anterior realizada en abril. Y, destacó la importancia de continuar reduciendo la inflación a nivel global.

Este aumento se debe al impulso de las dos principales economías de la región: Brasil, cuya economía se expandirá un 2,1% (1,2 puntos porcentuales más alto que la previsión de abril), y México, con un crecimiento del 2,6% (0,8 puntos porcentuales más alto).

Sin embargo, se espera que el crecimiento en la región para 2023 sea considerablemente más bajo que el 3,9% registrado en 2022 debido a la desaceleración reciente después de la pandemia y a la disminución en los precios de las materias primas.

Para 2024, se pronosticó un crecimiento del 2,2% sin cambios respecto a las estimaciones anteriores. A nivel global, aunque el panorama es mejor de lo esperado, el FMI señaló que sigue siendo débil desde una perspectiva histórica debido al impacto de las tasas de interés más altas para combatir la inflación, lo cual sigue afectando la actividad económica.