Un paciente que estaba internado en un hospital de la ciudad brasileña de Recife asesinó este viernes a uno de los vigilantes del centro médico y después fue abatido cuando intentaba huir, informaron fuentes oficiales.

Los hechos ocurrieron hacia las 4:30 hora local (7:30 GMT) de este viernes en el Hospital de la Restauración, ubicado en el centro de Recife, capital del estado de Pernambuco (noreste), y provocaron pánico dentro del centro médico y un tumulto de pacientes y enfermeros.

De acuerdo con un comunicado del hospital, el paciente aprovechó un cambio de guardia de los vigilantes para apoderarse del arma de uno de los mismos.

Enseguida, otro vigilante intentó arrebatarle el arma al paciente y este, durante el forcejeo, abrió fuego y le dio dos disparos en el pecho.

El agresor igualmente disparó contra un tercer vigilante que intentó neutralizarlo, pero el profesional sobrevivió sin heridas gracias al chaleco antibalas que portaba.

El paciente huyó por unas escaleras ubicadas en los fondos del hospital y fue tiroteado por otros miembros del equipo de seguridad cuando intentaba abordar una ambulancia para proseguir su fuga.

Tanto el vigilante herido como el paciente fueron conducidos con vida hasta los quirófanos, pero ambos murieron.

De acuerdo con el hospital, el vigilante muerto, identificado como Nivaldo Bezerra da Silva, de 66 años, estaba realizando su último turno de madrugada en el centro médico antes de jubilarse.

El paciente, cuya identidad no ha sido divulgada, estaba internado en el sector de ortopedia tras quejarse de dolores en la espalda y se desconoce los motivos que lo llevaron a robar el arma y a iniciar el tiroteo.

La Policía, llamada tras el incidente, incautó las armas de todos los vigilantes del hospital y condujo a tres de los profesionales a una comisaría para que rindieran testimonio.