Ocurrió días atrás en un colectivo que iba desde el centro a la Sexta Sección. Una usuaria se bajó del micro e inició el camino hacia su trabajo, que quedaba a unas  cuadras de la parada. Y, mientras iba por la vereda, comenzó a sentir que una bocina la apuraba. No se quiso dar vuelta porque supuso que podía ser algún desconocido,  pero entonces escuchó que una voz femenina la llamaba. Se trataba de otra pasajera. A la mujer se le había caído la tarjeta SUBE y el chofer, al ver que no hacía caso a la 
bocina, condujo casi una cuadra para devolverle el plástico.