En el medio de la charla, pidió disculpas para responder un llamado por radio y el cronista escuchó cómo utilizaba durante la conversación, y en reiteradas oportunidades, la muletilla “al pelo”. Eso no llamaría la atención en otro caso, pero aquí fue notorio, ya que, justamente, ese es un elemento que no abunda en la persona de Hidalgo. Quizás la muletilla del jefe tiene que ver con una expresión de deseo.Va con onda