El anhelo de una selfie muy popular puede matar: si esto implica tomarse la foto en lugares o situaciones con algún tipo de riesgo como alturas elevadas, cuerpos de agua (mar, ríos o lagos), carrileras de tren o carreteras y mientras se conduc. Desde marzo de 2014, 127 personas han muerto por intentar tomarse una selfie. De las cuales, 73 ocurrieron en los primeros ocho meses de 2016.

Las cifras fueron recopiladas en un estudio que hicieron seis investigadores de la Universidad de Carnegie Mellon (Estados Unidos), el Instituto de Información Tecnológica de Nueva Delhi (India) y el Instituto Nacional de Tecnología de Tiruchirappalli, también en India. Y advirtieron que la causa más común fue por caídas de lugares altos (edificios y montañas), seguida de accidentes en trenes (atropellos a las personas por estar en la vía, para ser más exactos).

Volcano #selfie. When normal selfies are not extreme enough! pic.twitter.com/hSRWPDjfDX

— George Kourounis (@georgekourounis) 28 de agosto de 2014

¿Se está convirtiendo este fenómeno social en un peligro potencial? En 2015 hubo más muertes por selfies que por ataques de tiburón (aunque esto no quiere decir que las selfies sean más mortales que los ataques de estos animales). Pero, además, en las 127 muertes registradas desde 2014 hubo 24 accidentes grupales. Es decir que varias víctimas perecieron en un mismo evento. Es el caso de 10 jóvenes que navegaban en lago Mangrul en India y el bote en el que iban se volcó cuando intentaban tomarse una selfie. Siete de ellos murieron.

Los hombres son más propensos a este tipo de accidentes, incluso cuando las mujeres se toman más selfies. El estudio señaló que el 75,5% de las víctimas reportadas fueron hombres.

La investigación añadió que “dada la influencia de las selfies y el aumento significativo en el número de muertos y heridos debido al hecho de tomarse estas fotos, es importante estudiar en detalle los incidentes para desarrollar tecnologías que permitan reducir estos casos”. Por eso, el equipo detrás de este estudio está desarrollando una aplicación para advertirles a los usuarios cuando una selfie es muy peligrosa, dependiendo del lugar en el que se encuentren.

La mayoría de las 127 muertes reportadas fueron de personas entre los 20 y los 24 años (45 decesos). En el caso de los menores de 20 años, la cifra fue de 41 víctimas y 17 personas mayores de 30 años también murieron.