El gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, anunció que el año próximo, tras finalizar su mandato, será senador nacional y que en el 2011 aspira a llegar a la presidencia, a la vez que destacó que su relación con el Gobierno nacional “es madura”, ya que “no somos obsecuentes ni opositores”. Cuando en una entrevista que publicó el diario El Tribuno de Salta se le preguntó qué hará el año próximo cuando finalice su cuarto mandato en la provincia, indicó que “voy a trabajar desde el Senado de la Nación, para hacer una propuesta nacional, y ser presidente en el futuro”.

       Este último proyecto, aclaró,“no será el año que viene, porque no me voy a presentar, pero espero que sea dentro de cuatro años”. Al referirse a la relación entre su administración y la nacional, aseguró que “con la nación tenemos una relación seria y respetuosa, no somos obsecuentes ni opositores” de forma tal que “lo que está bien lo decimos y lo que está mal lo peleamos, en eso hay una relación madura”, sostuvo.

         Por otra parte, Romero consideró que en Salta “no dependemos de los gobiernos nacionales para progresar”, eso lo demuestra que “goberné los últimos cuatro años de (Carlos Saúl) Menem, que no fueron los mejores, y los cuatro de (Fernando) De la Rúa, que terminaron en una crisis enorme”. Por otra parte, destacó que en el 2007 “voy a apoyar solamente a los candidatos que lleve el partido Justicialista”, pero rechazó opinar sobre eventuales postulantes, a la vez que destacó que “voy a apoyar la normalización” del peronismo.

       En otro orden, expresó su rechazo a la recientemente aprobada Ley Federal de Educación. “No vamos a aceptar que se maneje la educación de la provincia desde el Ministerio de Educación”, indicó en ese sentido el jefe del Ejecutivo salteño.