Familiares de víctimas de los abusos cometidos en el Instituto Antonio Próvolo, de Carrodilla, se manifestaron este lunes por la tarde en la sede del Arzobispado de Mendoza, en una manifestación que provocó sorpresa e hizo movilizar a la policía para evitar mayores problemas.

Los manifestantes decidieron colocar afiches en las puertas de la sede religiosa ubicada en la esquina de San Juan y Catamarca y en las ventanas del histórico edificio. 

La protesta a modo de escrache generó la reacción policial. 

Por las denuncias de abusos cometidas en ese instituto religioso para personas hipoacúsicas, están detenidas varias personas, entre ellas, los curas Nicola Corradi y Horacio Corbacho, la monja Kosaka Kumiko y empleados administrativos con diversos grados de participación en la causa investigada por la Justicia desde 2017.