Cayó El Rengo y la policía está tras los pasos de su hermano, a quien apodan El Asesino.Así comenzó la mañana de ayer para uno de los involucrados en la causa que lleva adelante la Justicia por la extorsión que habrían sufrido los dirigentes de Godoy Cruz tras los incidentes del 12 de agosto en el Malvinas. El líder de la barrabrava tombina, Daniel Aguilera, fue apresado temprano, cerca de las 7, en su casa del barrio La Gloria y no opuso resistencia.
Al cierre de esta edición, el detenido declaraba ante el fiscal que investiga la compleja causa. Pero esto no es todo. La detención, ordenada por el fiscal especial Luis Correa Llano, confirmó lo que reveló este diario el miércoles 8: las escuchas telefónicas que establecieron connivencia entre funcionarios del Gobierno, dirigentes del club y los hinchas más violentos por el pago de viajes y entrega de entradas.
En primera instancia, el titular del Consejo de Prevención, Omar Pérez Botti, fue la víctima inicial: tuvo que dejar su cargo por estar vinculado con el ingreso de pirotecnia y con lo que serían oscuros negocios con licitaciones para instalar butacas en el estadio mundialista y para equipar la nueva cárcel de Cacheuta con modernos equipos de video. Estas y otras irregularidades serán investigadas, en breve, por otro fiscal de la Unidad de Delitos Complejos, cuando el fiscal Correa Llano envíe las correspondientes compulsas apenas levante el secreto de sumario, dentro de diez días. El otro punto fuerte del caso es el pago de micros por parte del Ministerio de Desarrollo Social, situación que no pudo ser desmentida por el titular de la cartera, Sergio Pinto.
ACUSADO. Cerca de las 13, El Rengo fue llevado en silla de ruedas –le falta parte de una pierna– al tercer piso de Tribunales para ser notificado de la imputación por extorsión, pesada carátula no excarcelable porque prevé de 5 a 10 años de prisión. Estaba junto a su abogado, Carlos Varela, quien el martes había solicitado al fiscal la eximición de prisión, petición que fue negada rotundamente por el magistrado.
También merodeaban cerca de la fiscalía, un tanto nerviosos, su padre y su mujer, a la espera de lo que sucedería. Cuando metieron al barrabrava a la Fiscalía, el abogado defensor solicitó que se le explicara a su defendido el motivo de la detención. Así fue que, durante más tres horas, los auxiliares de la fiscalía le leyeron todo el expediente. De esto se desprende lo que explicaron fuentes judiciales, tras un cuarto intermedio ordenado antes de la declaración del imputado.
Por un lado, aseguraron que las degrabaciones de las escuchas telefónicas involucran al Consejo de Prevención y, principalmente, a quien era su titular, Pérez Botti, tal como publicó El Sol. Por otro lado, las fuentes afirmaron que el Ministerio de Desarrollo Social está más que comprometido por el acuerdo con los dirigentes por el pago del traslado de la barra del Tomba cuando viajó a Rosario y a Buenos Aires.
El Rengo decidió prestar declaración pero no trascendió lo que le dijo al fiscal. Sin embargo, se sabe que durante el tiempo que estuvo apresado en la Alcaldía redactó varias páginas para tratar de defenderse. En las próximas horas, su hermano, Diego Aguilera –El Asesino–, quien también lidera la barra tombina, caería en manos de personal de Investigaciones, ya que ayer en la mañana no pudieron apresarlo y está prófugo. Está sospechado, al igual que El Rengo, de apretar a los dirigentes para obtener entradas y viajes y para lograr ciertos “beneficios” e impunidad dentro de los estadios.