A raíz de un desperfecto en una de las bombas del aire acondicionado del hospital, los bebés internados en la neonatología del hospital Lagomaggiore permanecieron 24 horas sin aire acondicionado, desde el jueves y hasta las primeras horas de ayer. José Luis Marengo, gerente asistencial de este efector de referencia, explicó el inconveniente y dijo que el problema de la falta de aire acondicionado lo padecen especialmente estos recién nacidos.

    Las incubadoras funcionan regulándose con la temperatura ambiental. Si esta sube, el mismo efecto se produce en el cuerpo de los bebés. Por esto, el jueves algunos tuvieron hasta 39 grados de temperatura. Además, se suspendieron las visitas de los familiares con el fin de evitar que por mayor presencia física se incrementara el calor. El cambio de la calefacción a la refrigeración toma tres días en el año. Esta vez, se le sumó este inconveniente.