Los pilares del presupuesto educativo para el 2007 están centrados en el mejoramiento de la infraestructura, la compra de computadoras para sumar a las salas de Informática y más de 150.000 libros que se distribuirán entre los alumnos de escasos recursos que cursan la educación general básica (EGB). La titular de la Dirección General de Escuelas, Emma Cunietti, pedirá 30 millones más que este año para reparar escuelas dañadas por el último sismo de consideración y otras que presentan fallas en la construcción.
La idea es invertir 50 millones de pesos durante el 2007 en la reparación de edificios escolares. Los números del borrador del presupuesto educativo para el año próximo se analizarán esta tarde con los responsables del Ministerio de Hacienda y, aunque la responsable del gobierno escolar no quiso aventurar números, se especula con que la pauta de gastos será superior a la que se está ejecutando este año, la que alcanzará los 825 millones de pesos.
Según los cálculos de Cunietti, con esos 30 millones que se sumarán a los 20 que se incluyeron en el Presupuesto 2006, se podrán reparar todas las escuelas que no están en condiciones para el dictado de clases.
DIDÁCTICOS. En el Ejecutivo se está analizando la cantidad de computadoras que se sumarán para optimizar el trabajo de los alumnos en las salas de Informática, las que actualmente cuentan con ocho o dieciséis computadoras. La intención es que los maestros cuenten con una o dos PC por alumno cada vez que deseen dictar clases en los laboratorios.
Por otra parte, en la DGE ultiman los detalles para la licitación que servirá para adquirir unos 150.000 libros que se destinarán a cubrir la demanda de los 300.000 alumnos que cursan la EGB. La idea es que todos los chicos tengan su propio libro de texto y dejen de lado las fotocopias. Para eso, el Gobierno deberá desembolsar entre cuatro y ocho millones de pesos. Cunietti confirmó que el presupuesto se analizará esta tarde con técnicos de Hacienda y remarcó que los números aún no están cerrados. Además, cargó contra el gremio, acusándolo de organizar medidas preventivas sin entender que la pauta no está terminada (ver aparte).