El Ministerio de Salud de Mendoza se convirtió en un cono de silencio. No solamente nadie habla. Nadie sabe cómo reaccionar luego de que se conociera el audio en el cual un integrante del Servicio de Emergencias Coordinado (SEC) trata con cierta desidia a quien se convertiría en una de las víctimas fatales de la tragedia en el hotel Reina Victoria, el 9 de enero.
Desde la cartera sanitaria sacaron un comunicado confirmar que denunciaron penalmente al operador por “presuntas irregularidades en el desempeño de su labor”.
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Rodolfo Valentino González Tovar (23), uno de los dos turistas venezolanos fallecidos por intoxicación con monóxido de carbono, se comunicó al 911 para alertar sobre el grave estado de salud de él, de su sobrino de 5 años y de su madre Tilma del Carmen Tovar Nacuare (55). La operadora policial del CEO lo derivó al SEC y a partir de allí mantuvo un diálogo con quien en principio era un médico, pero se confirmó que se trató de un radioperador.
A pesar de los pedidos de ayuda y de que el interlocutor aclaró que no era de Mendoza y tenía tono extranjero, desde el SEC sólo sugirieron ir a los hospitales Central y Notti.
El audio de esa comunicación que fue dado a conocer por El Sol desnudó la deficiente atención recibida y el caso omiso que se hizo al auxilio requerido.
Este jueves por la noche, en todos los teléfonos de los funcionarios de Salud vinculados con el caso sonó el mismo audio: “Bienvenido al buzón de voz…”. Nadie atendió. Desde la ministra Ana María Nadal hasta la titular del SEC, Inés Valencia, optaron por el silencio.
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Una primera información indicaba que había sido un médico el que había atendido el llamado redirigido por el CEO. Sin embargo, con el pasar de las horas diferentes fuentes en off aseguraron que se trató de un radioperador.
El audio sorprendió al personal médico del SEC. “No podemos creer lo que estamos escuchando. No sabíamos que había pasado eso. Es una locura. Había gente quejándose de fondo. ¿Cómo no escuchó eso?”, señaló uno de los profesionales.
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