De los doce presos que se fugaron de la Penitenciaría provincial en marzo, sólo resta recapturar a uno de ellos. Es que el martes a las 17.30 Carlos Gallardo Tapia, el penúltimo prófugo, fue apresado en Florencio Varela, Buenos Aires. En el hampa de esa localidad bonaerense no sólo conocían a este sujeto, sino que también El Chato Camargo, compañero de fuga de Gallardo, operaba en diferentes hechos delictivos.
Hay pesquisas que relacionan a estos dos delincuentes como dos personas que mantenían un vínculo cercano y se dedicaban a llevar adelante y planificar diferentes hechos delictivos. El último de los detenidos era considerado en Florencio Varela como uno de los máximos delincuentes entre los que se dedicaban a realizar actividades como piratas del asfalto y cometió, además, innumerables robos a mano armada.
Antes de su fuga, estaba cumpliendo una condena en la cárcel de Boulogne Sur Mer por robo a mano armada y otras causas. En la detención de Gallardo tuvo que actuar la Policía de Buenos Aires y un grupo de personas designadas por Correa Llano, debido a la gran peligrosidad de esta persona.
Mientras tanto, el fiscal de la Unidad de Delitos Complejos que instruye la causa por la masiva fuga en el Penal provincial, Luis Correa Llano, está realizando exhaustivas tareas de investigación para lograr dar con el último de los delincuentes fugados en marzo de este año.
