El torneo Apertura 2007, que comenzará el viernes, promete un nivel notablemente inferior al del Clausura pasado, dado el éxodo que se da al final de cada temporada, pero, paradójicamente, tendrá como novedad la televisación de todos los partidos.
Con sólo repasar los nombres propios de los futbolistas que emigraron del país, basta para tener una idea sobre la merma que se producirá en la categoría del espectáculo, que de todos modos intenta ser revitalizado con la transmisión, a través de la pantalla chica, de cien por ciento de los encuentros. Mauro Zárate (Vélez), Ezequiel Lavezzi (San Lorenzo), Juan Pablo Carrizo (River), Oscar Cardozo (Newell’s), Ernesto Farías (River), Oscar Ustari (Independiente), Gonzalo Bergessio (Racing), Daniel Díaz (Boca), Clemente Rodríguez (Boca), José Sosa (Estudiantes),Mariano Pavone (Estudiantes) y Cristian Ledesma (San Lorenzo) fueron figuras en la temporada anterior, pero partieron raudamente a clubes del exterior. Dos flamantes campeones mundiales sub 20, el arquero Sergio Romero (vendido antes de que concluyera el Clausura 2007) y el mediocampista Angel Di María también se alejaron tentados por los euros. Asimismo, promisorias apariciones en Primera como Leonel Núñez y Cristian Llama y baluartes del recientemente ascendido Huracán como Joaquín Larrivey y Mauro Milano son otros cuatro ejemplos del éxodo masivo en el fútbol argentino.
Constatada la incuestionable calidad de los jugadores que se fueron del país, el nivel de competencia del que provienen las incorporaciones de las veinte instituciones de primera división tampoco invita a pensar que habrá un juego elaborado.Veintidós por ciento de los refuerzos procede de clubes que actuaron en el ascenso en la temporada pasada y otro tanto proviene de equipos extranjeros, la mayoría de segunda categoría
En ese rubro figuran, por ejemplo,Alejandro Delorte, de Brescia a Argentinos; Federico Nieto, de Verona a Huracán; Lucas Alessandria, de Ponferradina a Tigre, y Enrique Seccafien, de la filial de Veracruz a Rosario Central. En San Lorenzo se da el curioso caso de dos delanteros que se suman al plantel, con flojos antecedentes inmediatos: Germán Herrera viene de descender con Real Sociedad y Bernardo Romeo llega sin haber tenido continuidad en Osasuna. Con la oferta televisiva a tiempo completo, respaldada por la inminente medida de permitir el ingreso de únicamente la mitad del público visitante, los entrenadores deberán hacer verdaderos malabares para lograr que el producto sea atractivo.