Un hecho insólito perturbó la siesta lasherina cuando una familia encontró una víbora en el patio de su casa ubicada en el asentamiento Honor y Patria.
Según información policial, los once hermanitos que habitan la vivienda comenzaron a jugar con el reptil de un metro y medio de largo pensando que era una soga hasta que advirtieron que se trataba de un animal.
Alertados por la situación, Personal de la Unidad Especial de Patrullaje (UEP) llegó hasta el lugar donde rescató a la víbora que intentaba ocultarse dentro de un pozo séptico.
Los uniformados pudieron constatar a través del jefe de equipo de inspectores de Recursos Naturales que era una culebra ratonera que se encontraba indefensa y había salido por el calor, momento en que se encuentran más activos los reptiles.
La situación que había generado miedo entre los vecinos culminó con la culebra volviendo a su hábitat natural. Fue liberada por personal de la UEP en una zona rural.