Las ocho personas detenidas por los recientes atentados fallidos en Londres y Glasgow (Escocia) tienen vínculos laborales con el Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés) de Reino Unido, según confirmaron ayer fuentes policiales a la cadena pública BBC. Siete hombres son médicos o estudiantes de Medicina, mientras que la única mujer arrestada en relación con los ataques trabajó en el pasado como técnica de laboratorio en un hospital del NHS. Así, los medios británicos se han apresurado a hablar del complot de los médicos, en alusión a la supuesta célula terrorista responsable de los dos coches-bomba desactivados el viernes en Londres y del ataque del sábado en el aeropuerto de Glasgow.
    Entretanto, las fuerzas del orden detuvieron ayer a dos hombres en Blackburn (norte de Inglaterra) en aplicación de la ley antiterrorista británica, tras requisar varias bombonas de gas, uno de los componentes encontrados en los cochesbomba de Londres. No obstante, la policía no concretó si esas dos detenciones tienen conexión con los atentados frustrados en Londres y Glasgow, mientras el país sigue en alerta máximo por terrorismo. La terminal 4 del aeropuerto londinense de Heathrow, el más grande de Reino Unido, fue desalojada hoy tras el hallazgo de una bolsa sospechosa, lo que provocó la cancelación de un centenar de vuelos antes de que fuera reabierta, una vez confirmado que se trataba de una falsa alarma.
    En otro hecho relacionado con la investigación de los ataques, artificieros efectuaron ayer varias explosiones controladas en un vehículo sospechoso estacionado frente a una mezquita en Glasgow, aunque no hallaron explosivo alguno. El último detenido por los ataques fallidos, capturado en Australia, fue identificado por la prensa australiana como el doctor Mohamed Hannef, de 27 años y nacionalidad india. Hannef, quien trabajó para el NHS en Cheshire (noroeste de Inglaterra), fue arrestado cuando se disponía a tomar un vuelo sólo de ida rumbo a India en el aeropuerto de la ciudad australiana de Brisbane.
     “Si bien es de nacionalidad india, (el sospechoso) fue contratado desde Reino Unido y vino aquí con un visado de trabajador cualificado”, confirmó hoy el ministro australiano de Asuntos Exteriores, Alexander Downer. También ejerce de médico el iraquí Bilal Abdulla, uno de los dos hombres que se lanzó contra la terminal del aeropuerto de Glasgow en un jeep cargado con botonas de gas.