No fue una tragedia, de milagro. El caso ocurrió el domingo pero se mantuvo “en secreto” porque los protagonistas principales de la historia fueron dos policías de la comuna de Malargüe. Lo cierto es que, la madrugada de ese día, un uniformado de 44 años disparó su escopeta mientras se encontraba en la búsqueda de un revoltoso y los perdigones terminaron impactando en la cabeza en un colega que participaba en el rastrillaje.

La víctima, un auxiliar de la fuerza de 36 años con prestación de servicios en la Comisaría 24ª, sufrió diversas heridas en el rostro y el cuerpo cabelludo que motivaron su internación en el hospital del citado departamento. 

Por esto, la Inspección General de Seguridad (IGS) inició una investigación administrativa, como así también la Justicia para determinar responsabilidades, contaron fuentes del caso.

Confuso 

El hecho tuvo su inicio minutos antes de las 4, cuando ingresó un llamado al 911 advirtiendo sobre un grupo de sujetos que se encontraba causando problemas en una cervecería de la zona de calle Comandante Torres, cerca del cruce con San Martín y a una cuadra de la Comisaría 24ª.

Hasta el lugar fueron desplazados algunos policías y entrevistaron al encargado del local, explicaron las fuentes. El trabajador dijo que eran tres los jóvenes que causaban los inconvenientes en la cervecería.

Con todos los datos, los efectivos salieron en su búsqueda y advirtieron que los mismos se habían dado a la fuga por el techo de la propiedad, dirigiéndose hacia calle San Martín hacia el sur. 

A la altura de una plaza de la zona, uno de los policías dio la voz de alto a uno de los inquietos jóvenes.

El sujeto hizo caso omiso a la orden y esto provocó que el policía Juan Cataldo, sargento ayudante oriundo de San Rafael pero con prestación de servicios en Cuerpos Especiales de Malargüe, reaccionara disparando para intimidar el arma que portaba, una escopeta Rexio calibre12.70 número fabril 156844 de la Policía de Mendoza. 

Por causas que son motivo de investigación, las postas de goma terminaron impactando en uno de los compañeros que participaban en la búsqueda. Aldo Eliseo Bravo, auxiliar de la Comisaría 24ª, sufrió lesiones en el rostro y el cuero cabelludo, lo que motivó su traslado al hospital departamental.

No quedó claro cómo se produjo el hecho y es por eso que se iniciaron las investigaciones en la IGS y la Justicia. 

En el nosocomio, el médico Alejandro Di Lorenzo realizó las placas y el diagnóstico por las heridas del arma de fuego. 

Por su parte, uno de los jóvenes que fue señalado por causar daños en el local terminó detenido. Lo identificaron como Bryan Aliaga, de 21 años.