El paso internacional Cristo Redentor colapsó este fin de semana largo: hubo esperas de hasta 8 horas, 20 kilómetros de cola de vehículos y miles de personas que soportaron la falta de infraestructura ante de poder cruzar la Cordillera.
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“Venimos con dos personas mayores y no hay baños”, se quejó una mujer. “Siempre esperamos una hora o dos, nunca como hoy. La próxima vez lo vamos a pensar. Esto se soluciona poniendo más cabinas, más gente que trabaje para que esto sea un trámite”, agregó.
La mayoría de los mendocinos que viajaron a Chile lo hicieron en busca de mejores precios en tecnología, electrodomésticos, vestimenta y calzado. Ante las críticas, las autoridades nacionales recordaron que la demora se debe, en parte, a los controles que se realizan para evitar el ingreso al país de productos comprados en el vecino país y que luego no son declarados en la Aduana.
Cumplir con la normativa aduanera, reduce los tiempos de espera en los #PasosInternacionales https://t.co/Apj6EZnsqF pic.twitter.com/JL2ApXDTSi
— PasosInternacionales (@FronterasMinSeg) 10 de octubre de 2016
Otro turista cordobés calificó de “complicadísimo” el paso. “Podría ser mucho más ágil”, señaló. A su lado, su mujer reiteró una crítica habitual: “No hay baños químicos, nada”.
Según informaron desde Migraciones, hasta el viernes a las 12 de la noche pasaron 7.600 personas y el sábado hasta las 18.30 salieron 6.500 personas, mientras que ingresaron 6.000.
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El viernes hubo una atención menor a la esperada en Los Libertadores, ya que se abrieron menos casillas de las acordadas. Según precisó el subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Seguridad de Mendoza y coordinador del Paso a Chile, Néstor Majul, “desde Chile no cumplieron con el acta que se acordó en Valparaíso de tener más personal disponible para la noche de este fin de semana”.