Luego de la polémica del yerno de Jaime Correas en la DGE, saltó a la luz que otra figura radical también tiene familiares designados, en este caso, en la municipalidad de Las Heras. Se trata del senador provincial Héctor Quevedo, cuyos dos hijos trabajan en la comuna dirigida por el radical Daniel Orozco, además de una ex pareja. El legislador radical confirmó esos nombramientos, pero rechazó que se trate de un caso de nepotismo. 

El dato saltó a través de las redes sociales, donde a través de un árbol genealógico daba cuenta de los parentescos y los nombramientos.

El árbol genealógico de Quevedo en la municipalidad de Las Heras

Su hija, Paula Quevedo, fue nombrada como subdirectora de Desarrollo Social pero el legislador desmintió que gane $32.000 sino que aseguró que el sueldo de la joven está cerca de los $28.000.

Quevedo confirmó además que su hijo Hernán trabaja en uno de los Centros Deportivos, Recreativos y Sociales (CEDRyS) de Las Heras. Sin embargo, rechazó el abultado sueldo -unos $30 mil- y aseguró que gana solamente $.9000.

El joven además es el presidente de la Juventud Radical de Las Heras. Además el senador radical aclaró que sus dos hijos fueron designados por el intendente Daniel Orozco.

Defendió los cargos: “No es nepotismo”

“Tratan de ensuciar a mi familia, mi hija es magister en Trabajo Social, tiene las capacidades y mi hijo trabaja todo el día”, se defendió el legislador que, hasta el año pasado, era el titular de la comisión bicameral de Seguridad.

En cuanto a la novia de su hijo, Celeste Bustos, Quevedo aseguró que no trabaja para el municipio. Sin embargo en su perfil de Facebook la joven comparte constantemente todas las publicaciones del municipio que conduce Orozco.

También en el árbol genealógico figura Romina Ibáñez, ex pareja del senador. La mujer trabaja en la intendencia y estaría ganando unos 18 mil pesos, aclaró el legislador, a diferencia de lo que muestra el gremio docente -que, aducen, serían unos 35 mil pesos-.

Atento a lo que ocurrió con el yerno de Jaime Correas, titular de la DGE, Quevedo dejó en claro que sus hijos están dispuestos a dar un paso al costado si la situación incomoda a la gestión municipal.

Para Quevedo no se trata de “nepotismo” y se quejó de la situación. “¿Cuál es el límite entonces, quizás mi hija tenga que cambiar de apellido”, ironizó el senador.

Curiosamente, es el mismo argumento que tuvo Correas cuando justificó la designación de Paulo Belloso, a cargo de la Dirección de Integración Digital en la DGE, y por el que percibía un sueldo superior a los 50 mil pesos cuando asumió en diciembre, hasta su renuncia ocurrida la semana pasada. En ese sentido, Correas esgrimió que “no era nepotismo” porque el joven filósofo era idóneo para el cargo pero además porque “estaba en un lugar visible” en el organigrama ministerial.

A quién adjudica estos ataques

Por otra parte apuntó directamente a una de las delegadas del SUTE, Marisa Martínez, quien está difundiendo la información de su familia.

“Esa mujer tiene un criterio limitado porque es limitada, son los famosos docentes que están con misiones especiales”, dijo Quevedo, aunque olvidó que el gobierno le otorgará el ítem aula a quienes tengan misiones especiales, a pesar de no estar frente al aula.

“Esa mujer está todo el día al cohete paseando por la municipalidad y haciendo política para el SUTE. Buscan desestabilizar al Gobierno”, concluyó.

Así, Quevedo apunta a una estrategia del gremio estatal de escrachar a funcionarios o legisladores radicales cuando la Legislatura se apresta a aprobar el decreto de aumento a los docentes, que incluye el adicional ítem “aula”.