Los padres de un joven discapacitado mental, quien actualmente se encuentra en pareja con una chica con la misma problemática, acudirá a la Justicia para que se le practique a su hijo una vasectomía. La familia llevó la inquietud por la elección de un método anticonceptivo seguro para su hijo al programa de Salud Reproductiva, que depende del Ministerio de Salud de la provincia, y desde allí se le está brindando asesoramiento para abordar la problemática. Sin embargo, aclararon que este tipo de planteos es nuevo para ellos y apenas han alcanzado a evaluar los aspectos médicos de la situación.
CONTRACEPCIÓN. Sobre el procedimiento que se debe seguir para lograr la contracepción quirúrgica para el varón discapacitado, uno de los profesionales de la salud del programa, Pablo Alonso, detalló algunos inconvenientes que se deberán sortear para concretar la decisión familiar. La más importante de ellas es la existencia de una ley nacional de ligadura de trompas y vasectomía aún sin reglamentar. Al no estar en vigencia, la misma no puede ponerse en práctica. Otra complicación es la falta de antecedentes de casos similares.
De todas formas, aseguró que la intervención no es imposible y puntualizó los pasos que seguirán para obtener la aprobación. En primer término, y en vista de la incapacidad del sujeto para decidir por sí mismo, se debe acudir al hospital con la orden judicial y la autorización de la familia. Allí, un comité interdisciplinario de profesionales evaluará el caso y avalará o rechazará la operación. Alonso aclaró que aún en esa instancia se puede solicitar un recurso de amparo para lograr que se efectúe.
TEMA POLÉMICO. Alonso argumentó que la dificultad de abordar estas temáticas para las familias de los discapacitados reside en aceptar la posibilidad de que formen una pareja estable. En este caso puntual, los profesionales del programa sólo han tenido contacto con los padres del varón. Alonso señaló que si bien quisieron comunicarse con la familia de la joven a fin de proponerle otras alternativas de anticoncepción, aún no han tenido la posibilidad de hacerlo.
“No tenemos los datos de la chica, sospechamos que la familia no está de acuerdo con la relación”, aseveró. Sobre este aspecto, El Sol consultó con la psicóloga y jefa de área de discapacidad de Capital, Alejandra Weineraub. La profesional dijo que en la institución en la que trabaja –Casa del discapacitado– es normal que entre varones y mujeres con retraso mental leve y moderado se entablen relaciones afectivas.
Sin embargo, aseguró que para los padres de estos jóvenes, la situación es difícil de aceptar y es porque tienden a sobreprotegerlos y los consideran eternamente niños. Weineraub señaló que, contando con una profunda contención familiar y con los cuidados que la situación requiere –como en lo que respecta a métodos anticonceptivos–, no existen impedimentos para que estas personas puedan tener una vida sexual Ilustración Pablo Pavezka activa.