Mendoza tiene los índices de desnutrición aguda más altos de la Argentina. es que, mientras la media nacional de alcanza 1,2 %, en la provincia, este porcentaje llega a 3,8%. Los datos arrojados por la Encuesta Nacional de Nutrición demuestran que Mendoza está en desventaja con respecto a provincias más pobres, como Jujuy, donde el índice es de 1% o Formosa, en la que alcanza 0,8%.
Los chicos que padecen desnutrición aguda son aquellos que presentan bajo peso para su talla y se mide en base a índices de emaciación (enflaquecimiento extremo). El muestreo fue realizado durante el 2005 y sobre 1.080 casos de chicos de entre 6 meses y 6 años, y abarcó tanto a los niños sin cobertura social como a los que sí la poseen.
DESNUTRICIÓN AGUDA. Esther Chediak, encargada del área infantil de la Dirección de Maternidad e infancia, que pertenece al Ministerio de Salud, y quien proporcionó los datos de la medición, explicó que este tipo de desnutrición, a diferencia de la crónica, es la que se refiere a los chicos que pasan hambre agudo.
Es decir, los que en la actualidad no ingieren los alimentos que necesitan para desarrollarse con normalidad. Estos datos se pueden comparar, en principio, con los de la encuesta antropométrica realizada por el Ministerio de Salud de la Provincia en el año 2003, la que se hizo en base a 8.000 casos y sólo abarcó el sector público. Entonces, el índice de emaciación alcanzaba 2,3%.
MÁS NIÑAS. Chediak aseveró que no puede explicarse estos datos, en función a la situación económica de la provincia. A esta especialista también le resultó difícil de comprender el porcentaje de niñas que se encuentran en esta situación con respecto al de los varones: las primeras abarcan 5,5%, mientras que los segundos llegan a 1,8%.
Otro dato preocupante es el que se refiere a la prevalencia de anemia en la población infantil. Los números locales la sitúan en 11,6%, mientras que la media nacional es de 8% y la de Cuyo es de 8,2%.
BAJA DESNUTRICIÓN CRÓNICA. La especialista explicó que, en el marco de la información antes señalada, resultan muy extraños los índices de desnutrición crónica provinciales. La desnutrición crónica es aquella que se mide en razón de la baja talla para la edad. A los niños que la padecen se los conoce como acortados.
Chediak informó que, mientras en el 2003 el índice de acortados que arrojó el estudio antropométrico fue de 8,2%, el actual es de 3%. La media de desnutridos crónicos del país es de 4,2%. Para Chediak, la mejora es importante, dado que las secuelas que deja en los niños que la han padecido por dos años o más son prácticamente irreversibles.