Un mendocino promedio debe trabajar 4 meses y 11 días sólo para pagar impuestos anuales, ubicándose en el noveno lugar del ranking nacional si se tienen en cuenta los hogares de un ingreso y en el séptimo si se toman las familias que cuentan con dos salarios. Los datos surgen de un informe elaborado por el Instituto de Estudios para la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), de la Fundación Mediterránea, y toma a los trabajadores en relación de dependencia con una jornada laboral de 8 horas que comienza a partir de las 9 de la mañana.

    Las conclusiones revelan que un mendocino debe trabajar hasta las 11.45 para pagar impuestos nacionales, hasta las 11.52 si se tienen en cuenta los provinciales y hasta las 11.53 para hacer frente a tributos municipales. Es decir que, prácticamente, las primeras tres horas de la mañana se trabaja para pagar impuestos y las otra cinco horas para consumos personales. Para alcanzar las conclusiones dadas a conocer, se tuvieron en cuenta los tributos nacionales directos e indirectos: aportes personales, contribuciones patronales, ganancias, IVA, impuestos externos y específicos.

    Mientras que, en relación a impuestos provinciales, se tomaron los ingresos brutos y el impuesto al trabajo (sólo en ciertas jurisdicciones). Además, se sumaron los tributos municipales, como las tasas de seguridad e higiene, de energía, gas natural y la tasa de abasto (en algunas provincias). De esta forma, se está cubriendo 82 por ciento de los tributos que debe cancelar una familia tipo argentina. DISPAR.Con respecto a la carga tributaria total sobre el ingreso, Mendoza se encuentra por encima de la media nacional.

    En los hogares argentinos de un solo ingreso, el promedio que absorbe la presión tributaria es de 35,1 por ciento, mientras que Mendoza marca un 36,2 por ciento, ubicándose mejor posicionada si se toman jurisdicciones como Paraná, que marca el 39,1 por ciento, y peor que Río Grande, en donde sólo alcanza 24 por ciento (aunque debe destacarse que esta ciudad goza de una serie de exenciones impositivas a través de la Ley 19.640). Del análisis de las variables se puede deducir que las provincias que presentan mayor producto bruto son las que mayor carga fiscal poseen.

BAJO PODER.Otra de las medidas consideradas fue conocer cómo se veía afectado el poder adquisitivo de una familia en cada una de las regiones, al pasar de un caso hipotético sin impuestos (sin Estado) a uno donde hay presencia de impuestos de los distintos niveles de Gobierno. En las 24 jurisdicciones analizadas, las presiones tributarias nacionales son las que más hacen disminuir el salario. En el caso de los trabajadores mendocinos, 35,28 por ciento lo llevan los impuestos de la Nación, 2,53 los provinciales y 0,41 los municipales. O sea que la baja total sobre el poder adquisitivo es de 38,22 por ciento. En relación a este valor, la provincia se ubica en el octavo puesto del ranking, siendo superada por jurisdicciones como La Plata, que marca 39,75 por ciento, o Neuquén, con 40, 12 por ciento, pero sensiblemente mayor a otros lugares como Río Grande, con 24,40 por ciento, o Formosa, con 34,91 por ciento.