Julio Cobos rechazó ayer una propuesta que había tomado fuerza en el seno de su propio sector político: el adelantamiento de las elecciones internas de la UCR, previstas para mayo del 2007. La idea fue lanzada por el ministro de Gobierno, Sergio Marinelli, como reacción al pedido de intervención de la UCR provincial que hizo un senador del iglesismo. “Quizás, desde lo político, sea lo más aconsejable acortar el plazo, para que se termine de una vez por todas esta discusión y el que gane defina las políticas del radicalismo mendocino”, dijo Marinelli, a lo que agregó que la interna podría adelantarse para este año.

    Sin embargo, una hora después, Cobos dinamitó la idea de su ministro al sostener que “este año debemos dedicarnos a gobernar y no es conveniente instalar cargos con tanta anticipación”. El gobernador también descartó la intervención de la UCR porque “no hay ningún motivo”, e intentó bajar la tensión que produjo el pedido de Diego Seoane, integrante del sector que controlan Roberto Iglesias y Genoud.

    Cobos se quejó de la preguntas sobre la interna radical, aunque, por otro lado, tiene previsto seguir animando esta guerra: confirmó que, en los primeros días de octubre, protagonizará un gran acto, que fue corrido de fecha una semana debido a los viajes que hará el gobernador por el exterior a fines de este mes. Así, su agenda, inevitablemente, está mezclada: Cobos deberá combinar la arenga de campaña con viajes a España y Venezuela y el trascendental acto para anunciar la construcción del Trasandino, previsto para el 12 de setiembre.