Se acerca fin de año y con él diferentes festejos que demandan la estricta mirada de los programas de diversión nocturna. Si bien la nueva ley de boliches está en vigencia desde hace más de un mes, las fiestas de egresados y los festejos de esta época no están contemplados en el cepo a la diversión.

        Es que los estudiantes contratan sus fiestas con un año de anticipación y no se les puede cambiar los contratos. Rubén Origaen, coordinador del Programa de Diversión nocturna, reveló que las únicas limitaciones de este tipo de fiestas tendrán que ver con el horario de cierre y la canilla libre, ya que la aplicación del límite en el horario de ingreso, si bien es extensiva, no es generalizada y contempla las diferencias entre los acontecimientos, ya sean recitales, fiestas en salones especiales para eventos, matinés o boliches.

 RESTRICCIONES.

       En el caso particular de las fiestas realizadas en estos salones, se estipula el mismo horario de cierre que en los boliches, a las 5.30, y la prohibición de la canilla libre. Pero, al no haber taquilla, la entrada al local no tiene límites de horarios, según explicaron desde el programa oficial.

        Además, Origaen informó que las fiestas que se realizarán en esta época tienen contemplación, porque los servicios se contrataron hace más de un año y, “si se los restringe tanto, le pueden hacer una demanda al dueño del local”, dijo. En cuanto a las nuevas contrataciones de estos servicios, ya se prevé que estén encuadrados en la nueva Ley de Diversión Nocturna. “A todos los dueños de los salones de fiestas ya se les informó sobre la nueva ley, la que tienen que empezar a respetar en los contratos que se hagan en adelante”, explicó Origaen.

FIN DE AÑO.

         Las restricciones tampoco afectarían a las fiestas de fin de año. Los tradicionales festejos del 24 y el 31, que, en muchos casos, se extienden hasta el amanecer y se caracterizan por el elevado consumo de alcohol, no están contemplados en la Ley de Diversión Nocturna que entró en vigencia en octubre. Si bien desde el Gobierno aún no confirmaron cómo se reglamentará este tipo de eventos, el funcionario comentó que buscarán la forma de hacer extensiva la norma, intentando evitar accidentes en esos festejos.

REGLAMENTADA.

         Esta ley regula la actividad de los cerca de cien boliches que hay en toda la provincia y el horario de apertura se fijó a las 23, el tope para el ingreso es a las 2.30, a las 4.30 se cierra la venta de alcohol en la barra y deben bajar la música y subir las luces. Según estipula la norma, a las 5.30 los boliches deben desalojar el lugar y cerrar las puertas, según lo vigente desde los últimos días de octubre.

       Pero, además, la reglamentación, que busca ordenar y lograr una diversión nocturna para jóvenes y adultos sana y sin riesgos, tiene en cuenta otros puntos, como el traslado hasta los locales bailables y los controles de alcoholemia por parte de policías y padres protectores. Por otro lado, el refuerzo de patrullaje se efectúa entre las 5 y las 7 en los lugares públicos que se utilizan para diversión nocturna, como el Parque General San Martín y las plazas, entre otros.