La Sociedad Argentina de Pediatría nuevamente desmintió los rumores que hablaban de que la vacuna contra el síndrome de rubéola congénita provocaba malformaciones en la etapa de gestión y producía esterilidad. Especialistas en pediatría y miembros del Comité de Infectología aseguraron que la vacuna es segura y eficaz y que no hay nada que temer. Según explicaron, todas estas sospechas sobre las dosis surgen de unos correos electrónicos enviados por un grupo “que se mueve en las tinieblas” y que está en contra de las vacunaciones.
Lo que hacen estos individuos es generar confusión, incertidumbre e inseguridad en los profesionales y en la sociedad en general. Como manifestó Héctor Abate, jefe del servicio de infectología del Hospital Notti,“en las campañas que se han hecho en América, de 25.000 mujeres que recibieron la vacuna, ninguna adquirió el síndrome de rubéola. Hay riesgo prácticamente cero”. “Después de ser colocada la vacuna, recomendamos evitar el embarazo y a aquella mujer que haya sido vacunada y estaba embarazada se le hace un seguimiento y se la asesora a modo advertivo”, aseguró.
La campaña nacional, que comenzó en setiembre y se prolongará hasta noviembre, tiene el objetivo de que tanto hombres como mujeres (entre 15 y 39 años) sean vacunados contra el síndrome de rubéola congénita. Hasta ahora, 40 por ciento de los mendocinos de esa franja de edad ha participado de la campaña. La rubéola congénita es un conjunto de enfermedades que acompaña a la erección del virus en el feto que se está gestando en las primeras doce semanas. Esto produce en el bebé alteraciones oculares, cardiopatía congénita y sordera.