En tiempos de crisis, en los hogares se busca de forma ingeniosa alternativas para ahorrar o abaratar costos. Aunque no es tarea sencilla, hay algunos recursos para lograrlo. Priscila y Adriana son amas de casa, viven en Perdriel y para estirar la vida útil de la garrafa en la preparación de las comidas, aprendieron a armar cajas térmicas u “ollas brujas”. 

Junto a otras mujeres de Luján de Cuyo participaron de talleres de inclusión y sustentabilidad ofrecidos por el municipio. Desde la Secretaría de Desarrollo Urbano y la Subsecretaría de Economía Social están impartiendo cursos para aprender sobre la eficiencia energética desde el hogar. Con el empleo de este sistema se puede ahorrar entre un 20% a un 50% en el consumo de combustible para cocciones húmedas.

“La situación no está fácil para nadie y hay que rebuscársela para poder afrontarla. La consigna es ahorrar, el tema es cómo, y este recurso ayuda a hacerlo posible”, contó Priscila, que cocina sus alimentos sin necesidad de gastar mucho gas.

Malabares para ahorrar

El proyecto de cocinar con “ollas térmicas” surgió en el 2018 entre el municipio de Luján de Cuyo y la facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Cuyo. El objetivo fue llegar a las zonas rurales, sobre todo en lugares donde solo hay gas envasado.

“La caja está compuesta por un aislante térmico que mantiene la temperatura del alimento previamente hervido. Luego de dejar hervir la cacerola en la hornalla durante 3 a 4 minutos, la misma se coloca en la caja, se tapa y la comida sigue cociéndose por más tiempo sin gastar energía”, contó Alejandra Setien, subdirectora de Economía Social.

Priscila es una de las tantas mujeres que participó del taller y aseguró que quedó sorprendida cuando vio en acción la caja térmica: “No solo se ahorra tiempo, sino también gas”.

“Con solo una caja de tergopol, forrada con cartón y aluminio uno puede elaborar platos sabrosos sin necesidad de gastar gas, que es lo que a uno más le cuesta. Desde que cocino en esta olla térmica lo que he observado es que la garrafa me dura mucho más y eso es una bendición porque no es nada barata”, dijo la mujer.

Priscila reside en Perdriel. Está casada y tiene 7 hijos, de ellos, 5 viven en su hogar. La situación no es fácil, sin embargo, este tipo de alternativas hacen que la familia pueda reducir su gasto y economizar el uso de gas. 

“Antes la garrafa me duraba dos semanas y ahora, desde que uso esta olla, la estiro una semana más. Obvio que sin utilizar el horno”, manifestó.

A la hora de contar cuáles son los platos que ya ha elaborado, la mujer dijo que “solo pueden hacerse aquellos que llevan líquido”. Y detalló: “He cocinado pucheros, guisos y hasta arroz graneado”.

Adriana también es vecina de Perdriel y contó que se interesó en el proyecto con la finalidad de abaratar gastos en la casa.

“Con este sistema ahorro gas y también tiempo, ya que preparo la comida por la mañana temprano, luego me voy a hacer trámites y cuando regreso, cerca del mediodía, tengo todo listo y encima caliente“, contó la mujer, que ya tiene previsto armarle una caja a su hija.

Ambas refirieron que el gasto en garrafas es elevado. El precio en el barrio ronda los $950, la de 10 kilos, si la compra se hace en la Destilería o la Mercosur, el valor varía a $580 y $750, respectivamente. Para llegar a estos dos últimos, es necesario hacerlo en auto, ya que se encuentran en zonas alejadas al barrio.

Un poco más del proyecto

De acuerdo con lo referido por la ingeniera Agrónoma, Viviana Quiroga, “el modelo resulta de muy bajo costo, es posible su uso dentro de las cocinas y mantienen una independencia de las condiciones climáticas”.

Según la profesional, con el empleo de este sistema se puede ahorrar, aproximadamente, entre un 20% a un 50% en el consumo de combustible para cocciones húmedas.

“Este sistema de conservación de energía está dirigido a su utilización en comedores comunitarios o infantiles, para contribuir a paliar los problemas energéticos y los que ellos acarrean, como los nutricionales”, consignó en su proyecto.

Los pasos básicos a seguir para cualquier alimento son:

  1. Poner a calentar el líquido hasta el punto de ebullición.
  2. Una vez que el líquido llega al punto de ebullición, colocar las verduras o alimentos que se quiera.
  3. Dejar que este hierva por el período de 2 a 4 minutos en la hornalla.
  4. Retirar del fuego la cacerola y colocarla en la caja caliente y tapar.
  5. Dejar alrededor de diez minutos más del tiempo que la cacerola estaría en el fuego de la cocina.
  6. Retirar de la caja y servir.

Respecto al tiempo de cocción para platos, de hasta siete raciones, la especialista aseguró que es el siguiente:

  • Puchero (60 minutos).

  • Verduras duras: papas, zanahorias (50 minutos).

  • Verduras blandas: acelga, cebolla, chauchas (20 minutos).

  • Sopa de verduras (40 minutos).

  • Sopa de fideos (25 minutos).

  • Tallarines (30 minutos).

  • Guisos en general (60 minutos).

  • Estofados (60 minutos).

  • Polenta (30 minutos).

  • Compotas (25 minutos).

Hasta el momento, se han realizado los cursos en Ugarteche, Potrerillos, Las Compuertas, Mayor Drummond y Perdriel.