El enfrentamiento entre el Gobierno y la dirigencia agropecuaria recrudeció ayer con la decisión oficial de prorrogar las restricciones a las exportaciones de carne y asegurar el abastecimiento interno con la reducción del peso de faena, luego de que dos de las entidades del sector anunciaran un paro de ocho días a partir del domingo. En vísperas del vencimiento del plazo de las restricciones a las exportaciones de carne vacuna, la ministra de Economía, Felisa Miceli, anunció el mantenimiento de la medida, consistente en un recorte de las ventas al exterior de 30 por ciento, mediante una prórroga de 180 días.
Asimismo, la jefa del Palacio de Hacienda anunció, en conferencia de prensa, la reducción del peso de faena de 280 a 240 kilogramos, a los efectos de asegurar el abastecimiento del mercado interno. AL PARO. El anuncio de Miceli tuvo lugar horas después de que el presidente de las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Mario Llambías, anunció el paro total de actividades de productores a partir de la hora cero del domingo 3 de diciembre y hasta el lunes 11.
En el mismo sentido se expresará hoy en Rosario el consejo directivo de la Federación Agraria Argentina (FAA), el que también evaluará la realización de movilizaciones como cierre de la protesta. La Sociedad Rural Argentina (SRA) también convocó para mañana a una asamblea extraordinaria para tratar este tema, al tiempo que, en las últimas horas, dirigentes de esta entidad han delineado las propuestas y el camino que seguirán para expresar su malestar. Según informó Llambías, la medida de fuerza se realiza por “no haber recibido respuestas adecuadas para asegurar la política del sector a mediano y largo plazo”.
El dirigente aseguró que la protesta organizada por la CRA consta en “no comprar ni vender ningún producto y, en especial, granos, aunque este no será el caso de la leche, que es un producto perecedero”. Llambías aseguró que el paro en el campo “no produciría un desabastecimiento en el mercado de consumo, debido, por ejemplo, a que los frigoríficos seguirán operando”. De esta forma, el directivo de CRA afirmó que “el campo quiere mostrar su disconformidad con muchas medidas que se han dispuesto en los últimos tiempos” por parte de las administración que encabeza el presidente Néstor Kirchner.