El proyecto donde está detallado el destino de los 127 millones que recibió la Provincia por regalías mal liquidadas de Repsol-YPF se volvió a postergar otra semana. Esta iniciativa, que tanto necesita el Ejecutivo para saldar algunos problemas financieros que tiene en algunas áreas, se convirtió en el botín de guerra del que se agarró parte del justicialismo para canjear sus votos por un arreglo político de cargos para el año que viene. Tal como estaba pensado, y aunque los senadores tanto del iglesismo como del PJ lo niegan oficialmente, la pelea por las candidaturas del 2007 fue más importante a la hora de los consensos.

    Es que, por lo bajo, todos admiten que la disputa de fondo no son algunas modificaciones que se le pretende introducir al proyecto de las regalías, donde aparecen salvavidas financieros para la OSEP y para sostener el sistema de transporte público. Es más, aseguran que el ala del radicalismo K y el justicialismo, quienes más avalan la concertación con el presidente de la Nación, están dejando de lado al resto del peronismo en el arreglo electoral.

    Y señalan a los responsables: la senadora nacional Marita Perceval, los intendentes Rubén Miranda y Omar Chafí Félix y el radical y diputado nacional Alfredo Cornejo. La situación está tan espesa entre ambos partidos y en el seno de las mismas organizaciones, que ayer el Senado no le dio media sanción a la ley. Incluso, la pelea llegó a trasladarse a la discusión sobre un proyecto de resolución del demócrata Carlos Aguinaga para repudiar la contramarcha de Juan Carlos Blumberg realizada por el piquetero Luis D’Elía.