La crisis financiera no sólo ha hecho que el mercado inmobiliario en Mendoza se frenara sino que hoy existe una tendencia entre propietarios e inquilinos que consiste en renegociar el valor del inmueble, la famosa, contraoferta, hoy se puso de moda en el rubro. Además, preocupa el alto grado de mora en el pago de expensas.

De acuerdo a lo referido por Miguel Astorga, presidente del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza, la situación no está fácil ni para el propietario ni para el inquilino.

“Actualmente hay una tendencia en la que se impone la contraoferta, esto es, frente al precio estipulado por un alquiler ambas partes discuten por el más conveniente. Esto no era normal en este tipo de operaciones sí en la compra-venta de viviendas, sin embargo, hoy existe en los alquileres y ya se impone como algo normal”, dijo Astorga.

Esto lleva a que los propietarios determinen un precio “x” para sus viviendas y luego renegocien con el inquilino lo más conveniente para los dos. Hoy los alquileres, de acuerdo las zonas y comodidades, no bajan de los 7.500 pesos (un dormitorio con cochera) más expensas.

En cuanto al tema expensas, José Luis Griselli, presidente de la Asociación en Defensa de Inquilinos, manifestó que a nivel nacional se está produciendo otra tendencia que es la existencia de mora en las expensas.

“La gente no puede hacer frente a la situación financiera actual. Con lo justo llega al alquiler y la comida y posterga el pago de las expensas, lo que hoy es una queja recurrente en varios edificios y complejos privados del país”, refirió Griselli.

Frente a esto, José, quien se desempeña como portero de un edificio céntrico de nuestra provincia, manifestó: “Es una realidad que está en aumento y que comenzó hace varios meses. De 60 departamentos que hay en el edificio, cuyas expensas van de los 815 a los 1270 pesos, la mitad o menos paga en término, el resto lo hace en diferido, incluso, hay inquilinos a los que se les cobran tres meses juntos”.

Según lo referido por el trabajador, la mayoría de los morosos argumenta no contar con el dinero para las expensas y que prefiere deber ese importe a quedarse sin comida.

Con ese canon no sólo se abona el sueldo del portero sino que, además, el dinero se usa para realizar obras de mantenimiento del edificio, cambio de bombas de luz y mejoras en los ascensores, entre otros aspectos.

La compra-venta de propiedades, en caída

La trepada del dólar y de las tasas de interés hizo que en Mendoza se incrementaran entre el 8% y el 12% el valor de las viviendas.
 

“El mercado inmobiliario se frenó en un 98% en la provincia y eso tiene que ver con la suba del dólar, con la inflación y con la inestabilidad económica. Hoy el vendedor  prefiere no vender su vivienda hasta que la situación se estabilice y, el comprador, tampoco quiere invertir”, contó Astorga.

El empresario manifestó que se estima que en los próximos meses todo se reactivará pero que por ahora el panorama para la compra-venta en Mendoza no es muy alentador, a diferencia de lo vivido a fin del año pasado donde había más demanda que oferta.