Luka Modric es la gran figura de Croacia en la sorprendente campaña que ha realizado el equipo en el Mundial de Rusia 2018, donde por primera vez en su historia accedió a una final del certamen planetario. Sin embargo, no todo es felicidad para el volante del Real Madrid, pues en paralelo enfrenta una posible condena a cinco años de cárcel por falso testimonio.
Modric está bajo sospecha de haber sido cómplice del dirigente más poderoso que tuvo el deporte del país balcánico, Zdravko Mamic.
Como lo dictaminó el tribunal del condado de Osijek, el jugador habría recibido ilegalmente el 50% de su transferencia cuando pasó del Dinamo Zagreb al Tottenham de Inglaterra, en una operación liderada por Mamic.
En aquel entonces Modric era representado por el hijo del dirigente, Mario Mamic, y en sus contratos había ciertas cláusulas que obligaban al futbolista a compartir sus ganancias con el agente. Un convenio que no sólo aplicaba con Modric, sino con una gran cantidad de jóvenes jugadores que asomaban como los cracks del futuro.
El castigo podría ser de 5 años de prisión. Sin embargo, los dirigentes actuales de la Federación Croata de Fútbol enviaron un comunicado en el que garantizan la inocencia de su capitán.
La entidad asegura estar "profundamente convencida de la verosimilitud del testimonio de Luka Modric ante el tribunal de Osijek", al tiempo que resalta "una carrera deportiva y un comportamiento intachable en la selección".