Una corta charla en la Casa de Gobierno entre un alto funcionario de Néstor Kirchner y Julio Cobos alcanzó para destrabar los fondos para los planes de vivienda que se están aplicando en Mendoza. La máxima autoridad en política habitacional del país, Luis Bontempo, aseguró ayer que el mes que viene se lanzará el Plan Federal II, que favorecerá a 11.000 familias mendocinas sin casas. Además, indicó que el Gobierno Nacional pagará, este mes, la deuda que mantiene con la Provincia por las viviendas del Plan Federal I, que asciende a 31 millones de pesos.

       El subsecretario de Urbanismo y Vivienda de la Nación (un colaborador directo del ministro de Planificación Julio de Vido) vino a Mendoza para entregar casas e inaugurar obras en villas inestables. Sin embargo, apenas pisó suelo mendocino, fue al encuentro de Cobos para definir estos temas. Al rato aclaró a la prensa que la polémica de los programas de viviendas se originó sólo en cuestiones administrativas y de programación del Gobierno nacional.

      No obstante, desde hace unos meses y hasta el domingo, en el Gobierno provincial había preocupación por los retrasos en las partidas de la Nación. En especial, las correspondientes al Plan Federal II.

        Es que Mendoza tiene todo listo para empezar a construir las primeras 3.166 casas de este programa, pero hasta ayer no había noticias de la inversión que debe hacer la Nación: 182 millones de pesos en total. El encuentro entre Cobos y Bontempo restableció la afinidad política y, gracias a ello, tanto Bontempo como el presidente del IPV provincial, Raúl Cicero, aseguraron que el ritmo de la construcción no se va a parar, e hicieron una aclaración crucial: dijeron que las empresas del rubro que hacen casas para el Estado seguirán cobrando en tiempo y forma.

 TÉCNICO.

       Bontempo intentó mostrar ayer un perfil técnico y gambeteó todas las preguntas de tipo político. En especial, negó que Kirchner haga un uso arbitrario de la plata para hacer viviendas, como le endilga parte de la prensa. En este sentido, descartó que Mendoza y otras provincias que tienen amistad política con el Presidente hayan sido privilegiadas en el reparto de fondos: “Mendoza tiene una política relacionada a su déficit habitacional y todos los cupos se han realizado en el Consejo Federal de Vivienda, con consenso de todas las provincias”, aseguró.

       En el mismo lenguaje habló de los problemas de aplicación en varias provincias del Plan Federal de Viviendas, que la Nación lanzó en el 2004.“El plan no viene demorado, sino que tenemos que controlar todas las variables.No se puede superponer un plan con otro y tenemos que manejar capacidades empresarias, materiales y de mano de obra, porque sino, se pueden producir efectos nocivos”, explicó Bontempo, antes de entregar las casas de un barrio a medio terminar que se hizo al pie del Cerro la Gloria (ver aparte).

      En lo que estrictamente afecta a Mendoza, el funcionario confirmó que la Nación ya dispuso la plata para terminar las casas del Plan Federal I (hay 2.500 inmuebles en construcción) e iniciar el Federal II. A su turno, Cicero agregó que la promesa de la Nación es que las empresas que están trabajando en la primera parte del plan reciban un anticipo financiero (sería de 15%) para iniciar las obras de la segunda.

 DÉFICIT.

       El Plan Federal II incluye una inversión nacional de 17.000 millones de pesos. A través de los dos planes, se hará en el país un total de 420.000 casas, de las cuales 15.000 serán para Mendoza. Pero el déficit habitacional del país es mucho mayor: en Argentina hay 2,5 millones de familias sin casas y, hasta aquí, el Estado sólo ha podido atender a una quinta parte, confesó Bontempo.